Sábado 24 de diciembre de 2022, p. 13
Chicago. La tormenta invernal Elliot, de una intensidad sin precedente, arrasó la mayor parte del territorio de Estados Unidos ayer, provocando apagones y escasez de combustibles, lo que disparó los precios de la calefacción y la electricidad, además provocó cierres de rutas terrestres y aéreas en víspera de Navidad.
“Más de 240 millones de personas –más de 70 por ciento de la población– están afectadas por alertas meteorológicas”, dijo el Servicio Nacional de Meteorología (NWS).
Alrededor de un millón 500 mil hogares y empresas han sufrido apagones, sobre todo en Carolina del Norte y del Sur, Connecticut y Texas, reportó el sitio web PowerOutage, que hace un seguimiento de los informes de las empresas de suministro eléctrico.
Las refinerías de petróleo de Texas redujeron la producción de gasolina y diésel por averías en sus equipos, y los precios de la calefacción y la electricidad subieron por las pérdidas. La producción de petróleo y gas desde Dakota del Norte hasta Texas sufrió congelaciones que redujeron el suministro.
La capacidad de refinación a lo largo de la costa de Estados Unidos en el Golfo de México se redujo en 1.5 millones de barriles diarios debido a las gélidas temperaturas. No se espera que las pérdidas de producción sean duraderas, pero han elevado los costos del combustible.
Los precios del petróleo de referencia en Estados Unidos subieron el viernes 2.07 dólares (2.4 por ciento) a 79.56 dólares, y el gas en el oeste de Texas se incrementó 22 por ciento, hasta cerca de 9 dólares por millón de unidades térmicas británicas (mmBtu), el nivel más alto desde la profunda helada de 2021 en el estado.
Los precios de la electricidad en la red de Texas también se dispararon a 3 mil 700 dólares por megavatio hora, lo que llevó a los generadores a añadir más energía a la red antes de que los precios volvieran a caer a medida que los suministros térmicos y solares entraban en funcionamiento.
Las empresas de electricidad de Nashville, Memphis y el Valle de Tennessee realizaron apagones escalonados el viernes para conservar la energía mientras la región lucha contra un frente frío extremo.
En Georgia, cientos de personas en Atlanta y el norte del estado se quedaron sin electricidad, y enfrentaban la posibilidad de temperaturas bajo cero sin calefacción.
Casi 5 mil vuelos dentro, hacia o desde Estados Unidos fueron cancelados el viernes, según el sitio de seguimiento FlightAware. Los aeropuertos más afectados fueron los de Seattle, Nueva York, Chicago y Detroit.
Se esperaba que millones de personas salieran a las carreteras o abordaran vuelos para estas vacaciones, pero la tormenta ha impedido la movilidad. El condado de Erie, en el estado de Nueva York, emitió una prohibición para la circulación de automóviles.
Nos quedamos en casa. No puedo ver al otro lado de la calle
, dijo a la AFP Jennifer Orlando, de la ciudad de Hambourg, afectada por esa prohibición y donde por la mañana la temperatura era de -8 grados.
Varios estados, incluidos Nueva York, Oklahoma, Kentucky, Georgia y Carolina del Norte, se declararon en emergencia. Los accidentes viales han cobrado la vida de al menos seis personas en diferentes percances.
De frontera a frontera
El sistema de baja presión provoca un fuerte choque entre una masa de aire muy frío proveniente del Ártico y otra tropical que llega desde el Golfo de México. El fenómeno se extiende desde la frontera canadiense hasta el límite con México, y desde la costa del Pacífico hasta la costa atlántica, señalaron los meteorólogos.
En Canadá, WestJet canceló todos los vuelos del viernes en el Aeropuerto Internacional Pearson, de Toronto.
En México, cerca de la frontera estadunidense, los migrantes esperaban bajo temperaturas inusualmente frías la decisión de la Corte Suprema sobre la vigencia del Título 42, una medida que impide a muchos solicitar asilo.