Lunes 20 de febrero de 2023, p. 25
Atlanta. Decenas de personas llegaron ayer al Centro Carter de Atlanta para rezar y recordar el legado del ex presidente estadunidense Jimmy Carter en su pequeña iglesia bautista de Plains, Georgia, un día después de que se anunció que recibirá cuidados paliativos en su hogar.
Carter, que a sus 98 años es el ex presidente estadunidense más longevo, tuvo recientemente una serie de cortas estancias en el hospital. El Centro Carter señaló en un comunicado antenoche que el ex gobernante ha decidido pasar el tiempo que le queda en casa con su familia y recibir cuidados paliativos, en lugar de una intervención médica adicional
.
Carter era un gobernador (de Georgia) poco conocido cuando empezó su carrera rumbo a la presidencia antes de las elecciones de 1976. Luego derrotó al entonces presidente Gerald R. Ford, capitalizando su condición de forastero de Washington tras la guerra de Vietnam y el escándalo del Watergate que causó que Richard Nixon dejara el cargo en 1974.
Compromiso con los derechos humanos
Durante su presidencia, Carter se comprometió con los derechos humanos y plantó cara a las dictaduras militares latinoamericanas que entonces se imponían atrozmente en América Latina. Disfrutó de dos primeros años brillantes. El 7 de septiembre de 1977 firmó con el general Omar Torrijos los históricos Tratados Torrijos-Carter por los que el país itsmeño recuperó la soberanía del Canal.
Un año después, el 17 de septiembre de 1978, firmó con los entonces presidente egipcio Anuar el Sadat y primer ministro israelí Menaguen Beguin el pacto de paz conocido como los Acuerdos de Camp David.
Carter sufrió también numerosos contratiempos, el más grave fue la toma de rehenes estadunidenses en Irán y el desastroso y fallido intento de rescatar a los 52 estadunidenses cautivos en 1980.
En noviembre de ese año perdió la relección ante el republicano Ronald Reagan, quien ganó de forma abrumadora e inauguró una era de conservadurismo.
Con el paso de los años, surgió una imagen mejorada de Carter a quien se le reconocían sus actividades pospresidenciales y se revaluó su gestión.
Fundó el Centro Carter en 1982 para impulsar el desarrollo, la salud y la resolución de conflictos en el mundo. En 2002 recibió el Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos en favor de la justicia social y económica.
Carter vive en Plains, Georgia, con su esposa Rosalynn. Ahí nació y trabajó como agricultor de cacahuates antes de convertirse en gobernador.
Ha sufrido de una serie de problemas de salud que lo obligaron a hospitalizarse varias veces en 2019. En agosto de 2015 reveló que padecía cáncer cerebral y que se sometía a radioterapia, enfermedad de la que se recuperó, aparentemente contra todo pronóstico.
En lo que tal vez fue la acción de salud pública más ampliamente elogiada que realizó, su organización anunció en fecha reciente que sólo 14 casos de infección de la lombriz de Guinea en personas fueron registrados en 2021, resultado de años de campañas sanitarias para mejorar el acceso al agua potable segura en África.
La cifra es una gran reducción respecto de la fecha en la que el Centro Carter comenzó a encabezar las acciones de erradicación en 1986, cuando la enfermedad parasitaria afectaba a 3.5 millones de personas.
Carter dijo alguna vez que tenía esperanza de vivir más tiempo que el último parásito de la lombriz de Guinea.