Lunes 8 de mayo de 2023, p. 20
El Cairo., Los ministros de Relaciones Exteriores de la Liga Árabe decidieron ayer readmitir a Siria tras más de una década de suspensión, al consolidar un impulso regional para normalizar los lazos con el presidente Bashar al Assad, informó un vocero del organismo.
Siria podría reanudar su participación en las reuniones de la Liga Árabe de inmediato, señaló el bloque, y pidió una resolución de la crisis resultante de la guerra civil en esa nación, incluida la huida de refugiados a los países vecinos y el contrabando de drogas en la región.
La resolución fue tomada en una reunión a puertas cerradas de los cancilleres en la sede de la Liga en El Cairo, indicó Gamal Roshdy, portavoz del secretario general de la Liga Árabe.
Si bien los estados árabes, incluidos los Emiratos Árabes Unidos, han presionado por un acercamiento a Siria y Al Assad, otros, incluido Qatar, se han opuesto a la normalización total sin una solución política al conflicto sirio.
La membresía de Siria en la Liga Árabe se suspendió en 2011 tras la respuesta gubernamental a las protestas callejeras contra Al Assad que derivaron en una devastadora guerra civil que ya dejó cerca de medio millón de muertos y millones de refugiados y desplazados.
La normalización, que se anunciaba desde hacía meses, se vio favorecida por la solidaridad internacional ante los efectos del devastador sismo del 6 de febrero, que dejó más de 50 mil muertos entre Turquía y Siria.
Pero, a nivel diplomático, el gran catalizador fue la reconciliación en marzo entre Arabia Saudita, la gran potencia regional sunita, e Irán, potencia chiíta, gracias a una mediación de China. Riad dijo que tras su acercamiento con Irán se necesitaba un nuevo enfoque con Damasco, que indicó querer dialogar
y reforzar la cooperación
en una región que condenó al país al ostracismo a partir de 2011.
La Coalición Nacional Siria, principal alianza de la oposición con sede en Turquía, consideró que la decisión implicaba abandonar
a los sirios.
Para Fabrice Balanche, especialista en Siria, se trata de una victoria diplomática
para Damasco.
Si Siria acepta participar en la cumbre de la Liga, a celebrarse en Arabia Saudita el día 19, implicaría un regreso espectacular, teniendo en cuenta que en 2013 la oposición ocupó el asiento de Damasco en una cumbre de la Liga Árabe en Qatar.
La organización panárabe también impuso sanciones económicas al país.
Varias naciones árabes apoyaron a los rebeldes al inicio de la guerra, que sucesivamente se convirtió en terreno de juego para numerosas potencias extranjeras –incluidas Rusia e Irán, aliadas del gobierno de Al Assad– así como para grupos yihadistas, como el Estado Islámico.
Por otro lado, y según una investigación publicada por Afp en noviembre, Siria logró mantenerse financieramente a flote gracias a la exportación del captagon, droga que ha generado una industria ilegal de más de 10 mil millones de dólares, y convertido al país en un narco-Estado.