Si no se eleva el tope, el panorama es catastrófico
, advierten analistas y funcionarios
Martes 9 de mayo de 2023, p. 19
Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y los principales republicanos y demócratas del Congreso se reunirán esta semana para tratar de resolver el estancamiento de tres meses en torno al techo de la deuda estadunidense, que asciende a 31.4 billones de dólares, y evitar una suspensión de pagos antes de finales de mayo.
El presidente, del Partido Demócrata, pide a los congresistas que eleven sin condiciones el límite de endeudamiento autoimpuesto por el gobierno federal. El líder de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, del Partido Republicano, ha dicho que su cámara no aprobará ningún acuerdo que no recorte el gasto para hacer frente al creciente déficit presupuestario.
Biden dialogará este martes en la Casa Blanca con McCarthy por primera vez desde el primero de febrero, con el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, y con el principal republicano del Senado, Mitch McConnell. El principal demócrata de la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries, también participará en las conversaciones.
Sin embargo, los analistas no prevén un acuerdo inmediato para evitar un impago histórico, que el Departamento del Tesoro ha advertido que podría producirse tan pronto como el primero de junio.
El impago sería catastrófico
, dijo el senador demócrata Chris Coons.
Mientras, la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, advirtió que si el Congreso no eleva el límite de la deuda federal asestaría un duro golpe a la economía estadunidense y debilitaría al dólar como moneda de reserva mundial.
El lunes, un sindicato de empleados públicos demandó a Yellen y al presidente Biden para tratar de impedir que acaten la ley que limita la deuda del gobierno, al considerar que es inconstitucional.
La demanda, presentada por la Asociación Nacional de Empleados Gubernamentales, dice que si Yellen acata el tope de deuda una vez que sea obligatorio, posiblemente el próximo mes, ella tendrá que decidir cuáles obligaciones pagar una vez que quede limitada la capacidad del gobierno de pedir dinero prestado.
La asociación representa a unos 75 mil empleados que, según dicen, están en riesgo de perder sus empleos o prestaciones si el Congreso se niega a levantar el tope de deuda.
Por su parte, la Oficina de Responsabilidad del gobierno de Estados Unidos (GAO, por sus siglas en inglés) alertó que el país enfrenta un futuro fiscal insostenible, pues gasta más de lo que puede, al punto que la deuda superará al producto interno bruto (PIB) en una década.
Al final del año fiscal 2022, la deuda pública rondaba 97 por ciento del PIB, y se prevé que crezca a un ritmo más veloz que la economía, y que alcance su máximo histórico de 106 por ciento del PIB en 10 años y continúe creciendo a un ritmo creciente
, señaló la GAO.