Hermosillo, Son., Los tres presuntos homicidas del líder de la tribu yaqui Tomás Rojo Valencia, fueron sentenciados a 28 años cuatro meses de prisión, informó la fiscalía de Sonora.

Precisó que Francisco Hiram o Irán N, El Morocho, de 26 años; Gilberto N, El Gil, de 35, y Carlos Alexis N, El Pollo, son culpables de los delitos de homicidio calificado con premeditación, alevosía y ventaja y por asociación delictuosa.

El crimen fue perpetrado el 27 de mayo de 2021 en Vícam, donde los sujetos interceptaron al activista, para llevarlo a un paraje en despoblado, privarlo de la vida y sepultarlo en una fosa, donde fue localizado el 17 de junio.

La fiscalía del estado señaló que el trabajo científico de investigación que realizó su personal, llevó a esclarecer el crimen que estremeció a la comunidad yaqui y a los sonorenses en general, primero por la desaparición del dirigente y luego por su localización sin vida.

Tomás Rojo salió el 27 de mayo de 2021 a caminar por las calles de Vícam, como lo hacía con frecuencia para ejercitarse todas las mañanas, pero fue interceptado por hombres que iban a bordo de dos vehículos, quienes se lo llevaron a un terreno despoblado a 12 kilómetros.

Tras secuestrarlo, lo lesionaron en la cabeza y en varias partes del cuerpo, posteriormente lo sepultaron en una fosa y estuvo como desaparecido, hasta que fue encontrado el 17 de junio junto con el arma que utilizaron los homicidas.

Luego de las indagatorias fueron capturados El Morocho, El Gil y El Pollo, en coordinación con personal de seguridad de los tres órdenes de gobierno perteneciente a la Mesa Estatal de Seguridad del Estado, que derivó en las sentencias condenatorias.

Opositor a acueducto

Rojo Valencia, líder de la etnia, fue uno de los principales opositores al acueducto Independencia en la administración de Guillermo Padrés Elías, por lo que fue amenazado y perseguido por fuerzas policiales en esa época.

Encabezó la llamada guerra por el agua en Sonora, acompañado por un grupo de yaquis, entre ellos Luis Urbano Domínguez Mendoza, quien también fue asesinado en el centro de Cajeme.