Lunes 15 de mayo de 2023, p. 26
Al menos 22 personas han muerto y 219 mil han tenido que abandonar sus casas debido a las inundaciones que afectan varias regiones de Somalia, según el último balance publicado por la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios. Las crecidas de agua han anegado viviendas, tierras de cultivo, se han llevado el ganado y han obligado a cerrar los colegios y los centros de salud. Una de las zonas más devastadas es el distrito de Belet Weyne (en la imagen), en el estado de Hirshabelle, y en Baardheere, en Jubalandia. El lado positivo es que las lluvias rellenarán las reservas de los pozos y facilitarán la regeneración de la vegetación, pero serán necesarias muchas más precipitaciones para aliviar el impacto de la reciente sequía.