Washington. Con apenas dos días de margen, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmó este sábado la ley que eleva el techo de deuda del gobierno de Estados Unidos, evitando así un impago sin precedente de la mayor economía del mundo.

La Casa Blanca informó sobre la rúbrica, realizada en privado en la residencia presidencial, en un comunicado, en el que Biden agradeció a los líderes del Congreso su colaboración.

Esta semana el Congreso aprobó la Ley de Responsabilidad Fiscal de 2023, que suspende el tope que era de 31.4 billones de dólares de la deuda pública estadunidense hasta el primero de enero de 2025, es decir, después de las elecciones presidenciales de finales de 2024, y fija también determinados objetivos presupuestarios.

Sin esta legislación, aprobada el jueves por el Senado, de mayoría demócrata, y el miércoles por la Cámara de Representantes, de mayoría republicana, la mayor economía mundial corría el riesgo de no poder afrontar sus compromisos de deuda. El Departamento del Tesoro había advertido que el país empezaría a quedarse sin liquidez para pagar todas sus facturas el lunes, lo que habría enviado ondas de choque a las economías de Estados Unidos y del resto del mundo.

Se protegen prioridades

Como casi todas las economías desarrolladas, Estados Unidos vive a crédito y, en términos absolutos, tiene la mayor carga de deuda del mundo. Pero ningún otro país industrializado se enfrenta regularmente a un techo de deuda rígido que el Congreso deba elevar.

La agencia de calificación Fitch mantuvo en revisión la calificación AAA de Estados Unidos, pero deploró la polarización política y constató un deterioro constante de la gobernanza en los últimos 15 años.

Durante meses los republicanos se negaron a aumentar el límite de endeudamiento del país, a menos que los demócratas accedieran a recortar el gasto.

Aprobar este acuerdo presupuestario fue fundamental. Lo que estaba en juego no podría haber sido más alto, declaró Biden desde la Oficina Oval el viernes por la noche. Nada habría sido más catastrófico que el incumplimiento de pago de la deuda del país, agregó.

Estamos recortando gastos y reduciendo los déficits al mismo tiempo, aseguró Biden. Estamos protegiendo prioridades importantes desde el Seguro Social hasta Medicare, Medicaid, veteranos y nuestras inversiones transformadoras en infraestructura y energía limpia.