Sábado 17 de junio de 2023, p. a11
Mujeres y feminismos... es una exposición militante
que pretende mover conciencias gracias a una búsqueda exhaustiva por el pensamiento de Carlos Monsiváis y las numerosas piezas de su colección.
En el Museo del Estanquillo se abre hoy un arco histórico de las mujeres del siglo XIX en un momento en que persiste una reali-dad contradictoria de dolor y avance, con especial dedicatoria a quienes han sido violentadas, a las madres buscadoras, pero también a las que luchan y resisten
.
La escritora Elena Poniatowska recordó con tristeza y alegría al autor de Días de guardar, fallecido el 19 de junio de 2010. Carlos tiene mucho de novio, no sólo de este museo, sino de tantas mujeres que lo amamos
, expresó la periodista en conferencia de prensa en el recinto.
Hemos tratado de reflejar lo que Monsiváis hubiera hecho con este tema
, señaló el curador Moisés Rosas sobre la muestra Mujeres y feminismos en las crónicas y colecciones de Carlos Monsiváis, la cual permanecerá abierta al público hasta el 6 de noviembre en el espacio ubicado en Isabel la Católica 26, en el Centro Histórico.
Detrás de esas imágenes está el mundo heteronormado, el machismo y el sexismo que las ha condenado a una subordinación que no es aceptable
, añadió.
La visita guiada se hace con la propia voz de Monsiváis, a través de 105 epígrafes y de su mirada como coleccionista que se conjugan para hablar de un tema vigente gracias al pensamiento e imágenes de quien fue aliado varón y un pionero en la causa por las mujeres, casi un pitoniso, se describió.
Con 733 piezas, entre fotografías, grabados, miniaturas, maquetas y documentos se hace el recorrido histórico por las representaciones sociales de las mujeres, desde la mirada paternalista e infantilizadora, hasta la reinvindicación emancipadora. Las obras de artistas como Olga Costa, Lola Cueto, Yolanda Andrade, Kati Horna, Leopoldo Méndez, Diego Rivera o Ernesto Cabral, trazan los rasgos de las muchas mujeres mexicanas, y el tránsito de los siglos recientes.
En una crónica visual del siglo XIX, dividida en ocho núcleos temáticos se abordan temas como la infancia, la idealización romántica, la religión y la familia, las mujeres indígenas y burguesas. De igual forma, se explora la participación en movimientos políticos y sociales, en la vida económica y social. En un segundo piso, una gran área dedicada a las creadoras, las artes plásticas, el cine, la literatura y el teatro.
era un gran enamorado y un gran misógino, expresó Elena Poniatowska durante la apertura de la muestra en el Museo del Estanquillo.Foto Roberto García Rivas
Poniatowska rememoró al gran cronista de la ciudad, habló de su madre María Esther y de los numerosos viajes que hicieron juntos, las pasiones que despertaba. Era un gran enamorado y un gran misógino. Le hubiera gustado estar aquí porque hay transparencia y porque lo queremos
, afirmó la escritora y una de sus entrañables amigas.
El libro Misógino feminista, publicado en 2013 con textos de Monsiváis, se convirtió en hilo conductor de la exposición que retoma las ideas y la colección de quien se describía como alguien que: Alterna su misoginia con una encendida defensa del feminismo
.
El historiador Moisés Rosa puntualizó que estamos viviendo un momento terriblemente dramático, donde cotidianamente escuchamos, de manera muy lamentable y dolorosa, de asesinatos, violaciones, secuestros, desapariciones de mujeres, sobre una realidad que nos desgarra
.
Por otro lado, subrayó, de forma favorable se alienta que las mujeres paulatinamente han tomado las riendas de muchas tareas políticas, económicas y sociales
.
Participaron en la presentación Alejandro Brito, director del Museo del Estanquillo; Beatriz Sánchez Monsiváis; la antropóloga y feminista Marta Lamas, así como los cocuradores Ana Catalina Valenzuela y Joaquín Alonso Muñuzuri.
Al final del recorrido, después de observar a todas estas mujeres envueltas en rebozo, elegantes en el sepia de fotografías, vestidas de tehuanas, otras de rumberas, se colocó un gran espejo que invita al visitante de cualquier género a observarse en este proceso de reflexión. Lo acompaña uno de los epígrafes: frente al sexismo, la respuesta debe ser política, no moral
.