Sábado 17 de junio de 2023, p. 6
Esteban Volkov Bronstein, nieto de León Trotsky y guardián de la memoria histórica del revolucionario ruso, falleció anoche a los 97 años. Era el último testigo vivo del asesinato de ese político bolchevique a manos del español Ramón Mercader, el 21 de agosto de 1940, en su casa de Coyoacán.
La noticia del deceso fue comunicada por amigos y familiares en redes sociales, en las que se reconoció el compromiso que Volkov Bronstein mostró a lo largo de gran parte de su vida para preservar y difundir el legado de su abuelo. Entre otras acciones, lo hizo con un museo dedicado a ese personaje histórico en la capital mexicana.
Nacido en Yalta, en la península de Crimea, el 7 de marzo de 1926, Volkok Bronstein llegó a México a los 13 años procedente de Europa, gracias a los oficios de Trotsky y su segunda esposa, Natalia Sedova. Aquí estudió química.
Numerosas tragedias marcaron sus primeros años de vida. Pasó la mayor parte de su infancia emigrando de un país a otro con su madre, Zinaida, hija de Trotsky, tratando de protegerse de la persecución de Stalin. Al final, ella se suicidió cuando vivían exiliados en París. Su padre, Platon Volkov, fue enviado a un gulag en los años 30.
Volkov Bronstein relataba que vio a su abuelo por vez primera cuando vivía en el exilio en Turquía: Fui allí con mi madre Zinaida, a comienzos de 1931. Y vivimos en casa del abuelo en las Islas de los Príncipes, en el mar del Mármara
.
Fue en 1990 cuando convirtió la casa donde vivía con sus abuelos, en Coyoacán, en el Museo Casa de León Trostky.
Acaba de morir otra parte de la historia bolchevique. Que la Revolución te acompañe, camarada
, lo despidió en Twitter Frank García, uno de sus amigos.