Viernes 21 de julio de 2023, p. 27
Bagdad. Irak ordenó ayer la expulsión de la embajadora sueca, Jessica Svardstrom, después de que una turba quemó por la noche la sede diplomática sueca en esta capital, en protesta porque Estocolmo permitió una manifestación en la que se volvió a profanar un ejemplar del Corán.
Salwan Momika, refugiado iraquí de 37 años, pisoteó antier el libro sagrado, pero se abstuvo de quemarlo, como lo hizo el 28 de junio frente a la mayor mezquita de Estocolmo, lo que provocó un primer asalto a la embajada sueca en Bagdad.
Después de que se anunció la expulsión de Svardstrom, una turba incendió la legación. Una fuente de seguridad iraquí informó que están detenidos 20 sujetos que serán juzgados por el incendio.
Ayer, unos 200 hombres se manifestaron al grito de Sí, sí al Corán
, mientras alzaban el texto, junto a banderas iraquíes. Algunos de ellos quemaron banderas suecas.
Es una agresión contra 2 mil millones de musulmanes
, indicó Amjad al-Maliki, funcionario iraquí.
La cancillería de Suecia informó que todo su personal diplomático estaba a salvo, y que aún se desconoce la magnitud de los daños en la legación. Bagdad condenó el ataque a la embajada, pero advirtió a Estocolmo que rompería relaciones diplomáticas si permitía que las profanaciones continuaran.
Sanción a Ericsson
La oficina del primer ministro iraquí, Mohamed Shia al Sudani, confirmó la expulsión de Svardstrom y las autoridades también suspendieron la licencia de explotación del gigante sueco de telecomunicaciones Ericsson, según la agencia de prensa estatal INA.
La policía sueca justificó la autorización de la protesta. La Constitución establece que se necesitan muchas razones para negar un permiso para una reunión pública
, dijo la funcionaria policial Ola Osterling.
El canciller sueco, Tobias Billström, convocó al encargado de negocios iraquí en Estocolmo y afirmó: Lo que se produjo es totalmente inaceptable y el gobierno condena estos ataques del modo más vehemente posible
.
Francia y Estados Unidos condenaron el incendio y Washington consideró inaceptable que las fuerzas de seguridad iraquíes no actuaran para impedirlo
.
Turquía, que durante largo tiempo bloqueó la adhesión de Suecia a la Organización del Tratado del Atlántico Norte, condenó la repugnante
profanación. En tanto, el gobierno iraní envió una carta a la ONU, en la que condenó las profanaciones del Corán.