Plantas resistentes, incosteables
Ni palabras de consueloofrecen autoridades a naranjeros en crisis
Algunos sólo recibieron un litro de insecticida, acusa productor
Lunes 7 de agosto de 2023, p. 29
Álamo Temapache, Ver., De la Sader (Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural) y de Sanidad Vegetal no hay ningún tipo de ayuda, no sabemos nada, no hemos tenido una visita, ni siquiera palabras de consuelo. Los empleos de gobierno son trabajos de escritorio
, reprocha un productor de cítricos con más de 35 años en esa actividad, quien prefiere reservar su identidad debido a que fue víctima de extorsión.
El agricultor, de 65 años, quien posee 20 hectáreas de naranjales afectados por el dragón amarillo (o huanglongbing), considera que ésta es una de las enfermedades más duras que hemos pasado los citricultores de la región; nunca antes se había presentado algo así”.
Él es uno de los 70 ejidatarios de Moyutla, Tepetzintla, que colinda con el municipio de Álamo; todos tienen que lidiar con la plaga sin apoyo del gobierno federal o el estatal. La oficina más cercana de sanidad está a 100 kilómetros.
Desgraciadamente no contamos con ayuda de las autoridades, ni estatales ni federales ni municipales; esa es la realidad. Esperemos que volteen a ver la citricultura, porque si no, ¿qué vamos a hacer? Va a ser nacimiento de muchos delincuentes
, alerta el productor.
Hace un año, cuando apenas algunos árboles de su huerta comenzaron a padecer la enfermedad, fue víctima de extorsión. Tuvo que dejar el ejido por meses.
Cuando consideró que el peligro había pasado, regresó, pero sólo para percatarse de que la mayor parte de sus cultivos habían sido destruidos por la bacteria.
Con el dinero de la última cosecha, y ante el riesgo de que su plantación se perdiera, invirtió ese dinero en pagar deudas, construir una báscula para comercializar naranja y comenzar una nueva actividad que le permita tener una fuente de ingreso alterna.
Va a ser difícil atacar estos problemas sin ayuda. Tendremos que ver la forma de sembrar plátano u otros cultivos o dedicarnos a las hortalizas
, señala.
La Secretaría de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (Sedarpa) en Veracruz estima que hay entre 5 y 10 por ciento de huertas abandonadas luego de haber sido infestadas por el dragón amarillo.
Hace cuatro años, Ramón Pino Méndez, presidente del Consejo de Productores de Maíz y asesor de cafetaleros y agricultores de naranja, hizo un diagnóstico de la situación de la citricultura afectada por el huanglongbing.
El resultado del estudio se envió a la delegación de Programas Federales en Veracruz, la cual debía hacerlo llegar a la Sader, al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, a Sanidad Vegetal y a la Sedarpa.
Pino Méndez refiere que aquel diagnóstico reflejaba que el dragón amarillo ya afectaba 70 mil hectáreas de naranja en los municipios de Álamo, Tuxpan, Benito Juárez, Ixhuatlán de Madero y Chicontepec, entre otros.
Se esperaba que las autoridades tomaran cartas en el asunto, pero solamente emprendieron apoyos paliativos que no frenaron el avance de la enfermedad.
Hasta donde yo sé, no se ha tomado ninguna medida para parar esta situación; en las reuniones que tuve en las regiones, los agricultores se quejaban de que recibían un litro de un insecticida y firmaban por una cantidad bastante alta por parte de Sanidad Vegetal
, sostiene el productor de Tepetzintla.
Las instituciones no se han responsabilizado formalmente para controlar esa enfermedad, que es tan grave; los daños económicos para la citricultura van a ser de miles de millones de pesos
, estima.
Comenta que ante la mortandad de árboles de naranja, sobrellevan la situación con la siembra de plantas certificadas resistentes a la plaga. Sin embargo, es hasta cuatro veces más cara que una de un vivero sin certificación, por lo que resulta incosteable para los productores; para eso se requiere apoyo, financiamiento, créditos
, apunta.
Necesitan resembrar 70 mil hectáreas y les dan paliativos
Considera que en Veracruz se tienen que resembrar por lo menos 70 mil hectáreas. Estamos hablando de 26 millones de plantas que no hay en ningún lado, y eso va a ser un golpe terrible
.
Reprueba que no ha habido control alguno ni se vigila la producción de plantas en viveros. Muchas cosas que las secretarías deberían estar haciendo las han dejado de lado y eso va a dañar mucho a la citricultura
.
Ante la muerte de sus naranjos, muchos productores acuden a viveros no certificados y compran plantas infectadas. Al cabo de cuatro años ven que su inversión no sirvió, pues la planta se pierde antes de desarrollarse o dar su primer cosecha.
Hay muchos viveristas que buscan hacer lo mejor; el problema es que para producir una planta tiene que provenir de otra que esté sana, en condiciones de vivero, de invernadero, para evitar que lleguen los vectores a infectarla.
Considera que debe haber un control integral de los cultivos y usar productos que los nutran y los hagan resistentes a las enfermedades.
El costo de una planta certificada ronda 60 pesos, y una de vivero no certificada se puede conseguir hasta en 15 pesos. La ventaja de la primera es que se puede asegurar que, con buena nutrición, el árbol podrá vivir 20 o 25 años, pero si no está certificada su vida será de cinco a siete años.
La Jornada recorrió dos viveros en Álamo Temapache que ofrecen plantas nuevas a los productores. En los ejemplares se detectaron síntomas de la bacteria del dragón amarillo.
Pino Méndez lamenta que las autoridades jueguen a la comidita
, entregando paliativos a la población. El sector intermedio, los que producen para que coma la gente, está olvidado
, reprocha.
No hay interés del Estado en que las cosas se compongan. Ha habido una abandono de todo el sector campesino y desgraciadamente las secretarías de Agricultura, no importa quién esté a cargo, no han hecho absolutamente nada
, sostiene.