Lunes 18 de septiembre de 2023, p. a10
La Fórmula Uno lo recordará este domingo como el día que Red Bull colapsó. Una temporada en la que se hizo costumbre ver al equipo deltoro rojo en lo más alto del podio en cada carrera.
De las 14 competencias que se habían disputado, todas habían sido para esta escudería. Dos del mexicano Sergio Pérez y el resto del imperturbable neerlandés Max Verstappen.
Todo eso fue una inercia hasta ayer, cuando en el Gran Premio de Singapur, Ferrari se rebeló ante la hegemonía de Red Bull que no sólo quedó fuera de los lugares deprivilegio, sino además fueron desplazados hasta el quinto puesto para Verstappen y el octavo para Checo, en la peor actuación que han tenido como equipo en esta temporada.
El campeón en Singapur fue el español Carlos Sainz junior, seguido de Lando Norris, de McLaren, y Lewis Hamilton, de Mercedes. El accidente de George Russell, quien se estrelló en su Mercedes en la última vuelta, le costó el tercer lugar y permitió que su compañero y compatriota subiera a ese puesto.
Este resultado también significa el fin de una racha asombrosa de diez victorias consecutivas de Verstappen y 15 de Red Bull, si se incluye la última de 2022.
Mal augurio para el equipo líder
Los signos ya eran de mal augurio para el equipo dominante esta temporada.
Tanto el neerlandés como el mexicano tuvieron una terrible sesión de calificación con lugares muy desafortunados en la parrilla de salida para este domingo.
A pesar de todo había alguna esperanza en ellos, pues la pericia y temeridad que han demostrado podía dar algún giro inesperado.
El propio Checo Pérez parecía dispuesto a una de sus actuaciones contra las circunstancias. No hay que olvidar que en esta misma pista de Singapur fue campeón en 2022.
También había un pequeño orificio que permitía colarse un hilito de luz de esperanza, pues los circuitos urbanos, como este de Marina Bay, le han permitido protagonizar alguna épica.
Este circuito de Singapur, cinco kilómetros entre bulevares y calles citadinas, además de un túnel que evocan el clásico de Mónaco, podía ofrecer un escenario inmejorable para una demostración a lo Checo Pérez. Pero esto nunca ocurrió.
El triunfo del Cavallino Rampante ya se cocinaba desdela fecha anterior en Monza, la casa de Ferrari, donde Sainz ya se había mostrado díscolo y si bien no pudo tumbar la dictadura de Red Bull con Verstappen y Checo Pérez haciendo el 1-2, al menos subió al podio para anticipar lo que se venía ayer en Asia.
No obstante, después de 15 carreras, Verstappen sigue como líder indiscutible de la clasificación general con 374 puntos; detrás está su compañero Checo Pérez con 223 y Hamilton a mucha distancia los persigue como tercero con 189. El ganador de hoy Carlos Sainz está todavía muy lejos con 142.
Fue un desastre total. No tuvimos nada de suerte hoy
, lamentó un dolido Checo Pérez.
Verstappen quiso disimular la derrota y confió que en la próxima carrera de Suzuka, Japón, todo volverá a lo de antes.
Tenemos algunas ideas. No puedo entrar en detalles, pero me siento optimista sobre Suzuka
, aseguró confiado el campeón luego de la carrera.