Moscú. El movimiento de resistencia islámico Hamas está dispuesto a liberar a los casi 200 rehenes retenidos en la franja de Gaza si se establece un cese el fuego con Israel, declaró ayer el miembro de la oficina política de Hamas, Mousa Abu Marzouk.

Si se establece un alto el fuego, no tendremos ningún interés en retener a estas personas, comentó Marzouk a Al Jazeera, al ser interrogado si Hamas estaría dispuesto a liberar inmediatamente a los rehenes civiles en caso de armisticio.

El alto cargo del movimiento atribuyó la imposibilidad de trasladar y poner en libertad a los prisioneros a los intensos bombardeos israelíes.

Antes, el vocero de las fuerzas de Defensa de Israel, Richard Hecht, indicó que evalúan otras opciones, más allá de una posible invasión terrestre contra la franja de Gaza, a medida de que se preparan para “nuevas fases de la guerra.

Todo el mundo está hablando de una ofensiva terrestre, pero podría ser otra cosa, dijo, si bien no ha dado muchos detalles al respecto. Varios expertos han alertado de las dificultades que podría suponer una operación de este tipo y han señalado que esto podría provocar grandes pérdidas en ambos bandos.

El ejército israelí sigue reuniendo tropas en la frontera a medida que prosigue con los bombardeos contra Gaza. Además, ha procedido a evacuar a los residentes de varias localidades de la zona.

Israel tiene experiencia en operaciones terrestres en la franja de Gaza, pero todo parece indicar que ésta podría no ser comparable a las anteriores. Los expertos auguran que podría ser más prolongada y advierten de la complejidad de la guerra urbana en la zona.

Reprimen protesta

Las fuerzas de seguridad en Cisjordania reocupada lanzaron gases lacrimógenos para dispersar a manifestantes que tiraban piedras y protestaban contra el presidente palestino, Mahmoud Abbas, por su inacción ante los bombardeos de Israel a Gaza, mientras la indignación pública se desbordaba tras el ataque a un hospital del enclave costero.

Las fuerzas de seguridad palestinas reprimieron las protestas en Ramalá, mientras también se produjeron escenas de tensión en Jerusalén y en Belén cuando los manifestantes se enfrentaron al ejército israelí, informó la agencia de noticias Wafa.

Varias facciones palestinas han llamado a movilizarse en Cisjordania contra Abbas después de que el Ministerio de Sanidad gazatí denunció un ataque israelí contra un hospital en el norte de la franja, que dejó al menos 500 muertos.

Por otro lado, se han registrado violentas protestas en la embajada israelí en Amán, Jordania, donde se encuentra de viaje oficial el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, mientras centenares de personas se han citado en el consulado israelí en Estambul, en Turquía.

Desde que Israel respondió a la ofensiva que Hamas lanzó el pasado día 7, las fuerzas isralíes han matado a 61 palestinos y herido a otros mil 250 en Cisjordania.