Las subvenciones públicas a los sistemas de trenes de pasajeros representan una constante en varias economías. En Francia, durante 2021, la Sociedad Nacional de Ferrocarriles Franceses costó 18 mil 500 millones de euros al fisco, de acuerdo con un análisis de Finances Publiques et Economie (Fipeco), por encima de los 13 mil 700 millones de 2016. Esto se debe a la acumulación de resultados deficitarios y a las inversiones financiadas mediante préstamos, explicó la asociación.

En Reino Unido, 20 mil 346 millones de libras esterlinas sumó todo el apoyo gubernamental a la industria de ferrocarril, sólo 109 millones fueron a operaciones de pasajeros, eso entre abril de 2021 y marzo de 2022, de acuerdo con información oficial del Departamento de Transporte. Y en Estados Unidos, Amtrak ha sido subsidiada con 50 mil millones de dólares desde la década de los 70, sus ingresos duplican los gastos.

En general, a escala global, los servicios de ferrocarril, y en específico los de pasajeros, se sostienen con subvenciones, dado que se consideran un servicio público y a últimas fechas, una de las principales medidas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

De acuerdo con un comparativo de 161 transportes ferroviarios de pasajeros a nivel mundial, sólo 36 de ellos, menos de una cuarta parte y casi todos localizados en Japón, recuperan sus gastos operativos mediante las tarifas que cobran a los pasajeros. Eso no implica necesariamente que el servicio de tren sea económico.

Viajar en tren en Europa cuesta el doble que en avión, y algunas rutas ferroviarias cuestan hasta 30 veces más que sus vuelos correspondientes, de acuerdo con un estudio publicado por Greenpeace. El comparativo de 112 rutas muestra que las diferencias de precio se deben a diferencias regulatorias entre los dos modos de transporte.

En 79 de las 112 rutas analizadas, los vuelos resultaron ser más baratos que los trenes. Según el estudio, los viajes en tren son en promedio dos veces más caros que los vuelos; y sólo 23 rutas son más baratas en tren que en avión. Los países con los billetes de tren más caros en comparación con los vuelos son Reino Unido, Italia, Bélgica, Francia y España.

En México, los ingresos por operar un servicio de pasajeros sólo destacan para Ferrocarriles Mexicanos (Ferromex) con El Chepe que corre de Sinaloa a Chihuahua en dos tipos de servicio, uno de menor costo para la población local y uno turístico.

En 2021, el ingreso por pasajero trasladado en el Sistema Ferroviario Mexicano fue de 20.5 pesos. En la vía operada por Ferromex, de Grupo México, alcanzó 899.13 pesos, 4 mil 286 por ciento más alto que el promedio, y en el Suburbano de 16.79 pesos. En el Tren Turístico Puebla-Cholula y en el tramo de Administradora de la Vía Corta Tijuana-Tecate fue cero, de acuerdo con datos de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario.