Los padres y madres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en 2014 confirmaron que ayer fueron notificados de la decisión del gobierno federal de abrir todos los archivos en su poder a partir de enero, informó su representante legal, Vidulfo Rosales, y Emiliano Navarrete, uno de los progenitores.

El abogado de los familiares señaló que es atinada la decisión de abrir los expedientes, pero consideró incorrecto el proceso notificación, ya que se debió hacer en una reunión formal para darles a conocer esta decisión de suma importancia y trascendencia para la investigación y resolución del caso.

Señaló que la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración, que encabeza Arturo Medina Padilla, debe convocar a una reunión extraordinaria de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa (CoVAJ), que también preside, ya que, dijo, aún existen dudas sobre qué documentos se darán a conocer.

En cuanto a las dos reuniones anteriores, a las que no asistieron los familiares, aseveró que se debió exclusivamente a temas logísticos.

Emiliano Navarrete, padre del normalista José Ángel, coincidió en que se tiene que analizar la información que se proporcione a partir de enero próximo, ya que entre los datos faltantes está la comunicación intervenida que habla de que 17 estudiantes fueron trasladados a la brecha Los Lobos.

Se trata, puntualizó, de la intercepción telefónica a un mando policiaco y a un jefe del grupo delictivo Guerreros Unidos, que hizo el Ejército a las 10 de la noche del 26 de septiembre de 2014.