María Ariza, Directora de Biva
Domingo 31 de diciembre de 2023, p. 14
El control efectivo de la inflación –en alrededor de 4.5 por ciento– y que en la economía de Estados Unidos no presentó una recesión destacan como elementos positivos en medio de los desafíos económicos de 2023.
Hemos pasado por un periodo con un contexto global complejo. Este año nos enfrentamos a una inflación que no habíamos visto desde hace 20 años y, por tanto, a tasas de interés en niveles elevadas. Sin embargo, una de las cosas positivas fue el hecho de que en Estados Unidos no hubiera una recesión económica y eso, dado que nuestra economía está totalmente vinculada, permitió a México manejar un crecimiento económico por arriba de las perspectivas
, afirmó María Ariza, directora general de la Bolsa Institucional de Valores (Biva).
La inflación general en México alcanzó un pico de 8.70 por ciento anual en agosto de 2022, su mayor nivel desde diciembre de 2000. Con el fin de combatir este problema, el Banco de México elevó las tasas de interés hasta llegar a 11.25 por ciento.
A principios de año las expectativas de crecimiento del país para 2023 no eran halagüeñas, pues se preveía una contracción o un avance cercanos al uno por ciento, muy lejos de la perspectiva de la Secretaría de Hacienda que estimó un alza de 3 por ciento.
Ariza destaca que tras el empuje del consumo e inversión (demanda interna), más un mejor crecimiento en Estados Unidos, la economía mexicana podría haber crecido alrededor de 3.5 por ciento en el 2023.
Reiteró que una de las cosas positivas fue el hecho de que en Estados Unidos no hubiera una recesión económica y se le agrega toda la oportunidad que se está generando por la relocalización de las cadenas de suministro, que a México le está beneficiando.
La directora general de Biva explicó que tasas de interés en niveles elevados tiene consecuencias para el mercado, para la renta fija, para la renta variable, para el apetito de los inversionistas y para la colocación de portafolios.
Pronósticos para 2024
Para muchos manejadores de fondos, la renta fija se volvió un instrumento interesante dadas las altas tasas, de ahí que los mercados accionarios se vieron castigados en algunos momentos de 2023; al mismo tiempo las empresas encontraron un financiamiento más caro que perjudicó su esquema financiero.
La perspectiva es que ya no se ven más incrementos de tasas, por lo menos ya hay un techo, y en el 2024 empezaremos a ver una tendencia más moderada del costo del crédito que llevará a las tasas a niveles más competitivos, lo cual permitirá que haya más apetito y aceleración de la economía
, prevé Ariza en entrevista.
Para María Ariza, la economía mexicana se perfila a registrar un menor crecimiento, cercano a 2.1 por ciento para 2024. Tras su fortaleza en 2023, el peso rondaría los 19 pesos por dólar. La tasa de referencia bajaría a 9.25 por ciento y la inflación en alrededor de 4 por ciento. Mientras en Estados Unidos se estima un avance del PIB de 1.2 por ciento el próximo año.