Lunes 22 de enero de 2024, p. 4
En apenas 24 horas y nada más cruzar a Guatemala, la pequeña caravana de migrantes que partió el sábado del norte de Honduras con unas 500 personas quedó desintegrada, informó ayer el Instituto Guatemalteco de Migración.
Las autoridades estuvieron vigilando al grupo en tres cruces desde que llegó a la frontera. Parte del mismo avanzó unos kilómetros por territorio guatemalteco, donde fue atendido por funcionarios que dieron prioridad a los menores.
Según la agencia migratoria, el ambiente estaba en calma, no se usó la fuerza y prevaleció el diálogo. Quienes contaban con la documentación en regla pudieron seguir en tránsito por el país (Honduras, Guatemala, Nicaragua y El Salvador tienen libre tránsito entre ellos) mientras los que no tenían los documentos necesarios regresaron a Honduras.
Las autoridades no ofrecieron cifras de cuántos se quedaron o retrocedieron.
El grupo que partió el sábado caminando de la terminal de la ciudad de San Pedro Sula era el primero de estas características en salir de Honduras desde enero de 2022.
La mayoría de migrantes cruza Centroamérica y México en pequeños grupos, utilizando todo tipo de transportes y muchas veces pagando a las redes de tráfico. Los que forman caravanas son una ínfima parte de ellos.
Después de los masivos grupos de 2018 y 2019, Washington aumentó la presión sobre México y los gobiernos centroamericanos para que incrementaran sus medidas de contención, cuanto más al sur, mejor.
Desde ese momento, las caravanas comenzaron a quedarse bloqueadas, primero en el sur de México y luego en territorio guatemalteco, como ocurrió ahora.
Aunque en territorio mexicano se forman de vez en cuando grupos que optan por caminar desde la ciudad de Tapachula, tampoco logran avanzar mucho, como sucedió con el que partió el 24 de diciembre.
Durante 2023 el flujo de migrantes no dejó de incrementarse. En el año fiscal estadunidense –que concluyó en septiembre– las autoridades registraron casi 2.5 millones de cruces irregulares y las cifras se incrementaron en diciembre, cuando en algunos días hubo hasta 10 mil. Los primeros días de enero descendieron bruscamente a 2 mil 500.
México detectó más de 680 mil extranjeros en situación irregular de enero a noviembre. Además, un número récord de más de 140 mil personas pidieron refugio.