El gobierno local reubicó a 38 comerciantes de libros que se instalaban sobre avenida Balderas y que ahora podrán ejercer su actividad en la plaza de la Ciudadela, en un proyecto que tardó dos años en concretarse.

En esta acción se invirtieron 7.6 millones de pesos para fabricar el mobiliario urbano que se entregó a los libreros de ocasión, con las características para la venta de sus ejemplares, explicó el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Inti Muñoz.

Con lo anterior, precisó el funcionario, además de recuperar el espacio público se da una opción para esos comerciantes que por décadas se han dedicado a la venta de libros usados, antiguos o de colección.

Destacó que para habilitar el denominado Corredor Cultural Balderas, en el parque de la Ciudadela, la Comisión Mixta para el Mobiliario Urbano de la Seduvi trabajó en conjunto con los comerciantes para garantizar que tuvieran el espacio necesario para llevar a cabo sus labores con dignidad.

Los libreros fueron tomados en cuenta en la concepción de cada pieza del mueble en el que ofrecerán su mercancía y con las características que permitan, por ejemplo, evitar que el sol afecte los tomos, toda vez que cada uno de ellos está integrado por módulos techados, con estantes que se abren y cierran.

El coordinador general de la Autoridad del Centro Histórico, José Manuel Oropeza, dijo por su lado que se trabajó en el diseño del mobiliario de tal manera que realmente cada uno de ellos son una pequeña librería.

El representante de la Asociación Autogestiva de Libreros Corredor Cultural Balderas, César Sánchez, dijo que la presencia de los libreros en la ciudad ha sido una constante en sus calles, portales y plazas, pero en el caso de la avenida Balderas, debido a las peores prácticas del ambulantaje, trajo una serie de vicios que era necesario y urgente corregir.