Perdono a todos los que me han hecho daño
Jueves 9 de mayo de 2024, p. 26
Chilpancingo, Gro., El obispo emérito de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, declaró ayer que, en ejercicio de sus derechos constitucionales, no presentará ninguna denuncia contra las personas que tanto mal me han hecho
, y que perdona a todos los que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima producto de la desinformación
.
Esta es su primera declaración pública luego de que el pasado 27 de abril autoridades dieron a conocer su desaparición en Cuernavaca, Morelos, y dos días después lo encontraron en el hospital general José G. Parres, de esa ciudad.
El prelado pidió a los medios de comunicación me comprendan y respeten mi decisión al bien de mi seguridad e integridad física y moral
, difundió en un comunicado la mañana de ayer.
“Yo, monseñor Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa, me dirijo a todo el pueblo de Dios a través de este comunicado para informarles lo siguiente:
“Después de haber hecho oración, meditado profundamente y de haber consultado con mis seres queridos, tanto del clero como laicos y, en razón de que lamentablemente mi vida, edad y mi salud están en condiciones desfavorables; siguiendo los principios evangélicos de nuestro señor Jesucristo, que perdonó a las personas que lo traicionaron, lo vendieron, lo juzgaron, lo torturaron y lo asesinaron. Con todo mi corazón perdonó a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquellos que me han revictimizado producto de la desinformación.
Agradezco infinitamente a todas las autoridades, tanto legales como eclesiásticas, que han colaborado en este caso, y de manera muy especial al maestro Luis Gasca, quien ha sido mi abogado.
Reconoció también a todas las personas que se solidarizaron con él. Mi especial gratitud a todos aquellos que hicieron oración por mi vida y por mi pronta recuperación
, concluyó el documento.
Por su parte, el director del Centro Minerva Bello, el sacerdote José Filiberto Velázquez Florencio –quien junto con Rangel Mendoza logró un acuerdo con los grupos criminales para pacificar Chilpancingo y otras ciudades–, dijo que es respetable la posición del señor obispo, si antes perdonó a los líderes de estos grupos, hoy hace lo mismo. Ese es el papel de quienes servimos a la Iglesia, al pueblo
.
El pasado 2 de mayo el comisionado estatal de Seguridad de Morelos, José Ortiz Guarneros, negó que la desaparición del clérigo se haya tratado de un secuestro exprés, como reportó la fiscalía general de esa entidad, y afirmó que éste estuvo en realidad en el motel Real Ocotepec e ingresó junto con un hombre que más tarde se retiró del lugar. El religioso permaneció hospitalizado debido a diversos estupefacientes encontrados en un examen toxicológico.