a directora de escena Yevguenia Berkovich, de 39 años, y la dramaturga Svetlana Petriychuk, de 44, fueron arrestadas en Moscú el 5 de mayo del año pasado. El cargo: justificar el terrorismo en la obra de teatro Finist es un valiente halcón.

En ella, Yevguenia Berkovich y Svetlana Petriychuk entrelazan un clásico cuento de hadas ruso con la tragedia personal de una mujer que se enamora en línea de un extremista radical, quien la engaña para que vaya a Siria a unirse al grupo Estado Islámico.

Pero no hay un final feliz: sintiéndose horrorizada y traicionada, regresa a Rusia, donde la condenan por terrorista. La obra refleja las experiencias de cientos de mujeres que se unieron al grupo extremista desde Rusia y países ex soviéticos, como Kazajistán y Uzbekistán.

Estrenada en 2020, fue muy aclamada por la crítica y el público. Recibió dos Máscaras de Oro, principal galardón ruso para las artes escénicas. Figuras destacadas de la cultura de ese país sostienen que ésta es la primera vez en la era postsoviética que una obra de arte es efectivamente juzgada.

Las dos artistas se declararon inocentes y sostuvieron que en Finist es un valiente halcón no se justifica el terrorismo, que su objetivo era llamar la atención y arrojar luz sobre este problema, que en ella lo denuncian y analizan el engaño y la depravación de los extremistas violentos y las personas cuyas vidas arruinan. Sin embargo, el lunes pasado fueron condenadas a seis años de prisión.

El proceso y la sentencia contra ellas fue criticado por algunos de los intelectuales más renombrados de Rusia, como el premio Nobel de la Paz Dmitry A. Muratov y el director Kirill Serebrennikov, con quien Berkovich estudió. Igualmente, Amnistía Internacional, Human Rights Watch y varios grupos de derechos humanos.

En marzo de 2022, Berkovich estuvo detenida 11 días por manifestarse contra la invasión rusa a Ucrania, la cual comenzó, el 24 de febrero de 2022. Ella salió a la calle con una pancarta que rezaba No a la guerra. También publicó poesía en la que evoca la angustia de las ciudades ucranias devastadas.

Desde el comienzo de la operación en Ucrania, las autoridades rusas aumentaron la represión contra toda disidencia, con multas y penas de cárcel.