Ante la presión de los residentes de la colonia Escandón y de diversos problemas legales en los que la familia del alcalde de Miguel Hidalgo, Mauricio Tabe, se involucró con la operación del restaurante Don­Eraki, en Progreso 172, el local fue puesto en renta o a la venta.

Al negocio de la familia del funcionario panista, que a decir de los vecinos viola el uso de suelo, le fueron retirados el pasado 16 de julio las estructuras de metal y el nombre del restaurante de tacos árabes del acceso principal.

En las puertas y ventanas del inmueble ubicado en Progreso esquina Prosperidad, colonia Escandón, fueron colocados desde el lunes pasado dos letreros con el nombre de la inmobiliaria Vas Broker, un número telefónico, correo electrónico y la leyenda Renta; en un tercer cartelón se lee Renta-venta.

En el ventanal del inmueble nuevamente pueden verse grafitis, pero aún hay mesas y sillas en el negocio, y en el primer piso se observó a personas trabajando, aunque los cartelones en los que hace unas semanas se ofrecían contrataciones fueron retirados.

El pasado 25 de junio, los residentes de la colonia Escandón protestaron por la inminente reapertura del restaurante, que clausuraron de manera simbólica por violar la ley; además, exigieron al Instituto de Verificación Administrativa (Invea) que explicara por qué retiró los sellos de clausura sin que hasta el momento los quejosos tengan una respuesta.

El vecino y representante de la colonia Escandón II, Claudio Fonseca, comentó que el hecho de que la taquería fuera puesto en renta o venta derivó de la lucha que los vecinos realizamos desde hace más de un año, tras reprochar que se trató de un negocio amparado por el grupo de la corrupción inmobiliaria de la alcaldía Miguel Hidalgo.

Fonseca indicó que el establecimiento no tenía el uso de suelo y aun así el alcalde Mauricio Tabe dio su consentimiento para otorgar el aviso de apertura a un comercio que es ilegal, pero no le importó porque se trataba de su papá.

En septiembre de 2022, personal del Invea hizo una revisión al restaurante, pero Daniel Tabe, padre del alcalde de Miguel Hidalgo, amagó con un cuchillo pastorero a uno de los jóvenes verificadores. En la inspección, el personal no recibió los documentos que demostraran el legal funcionamiento del restaurante, por lo que se colocaron los sellos de suspensión de actividades y posteriormente fue clausurado.