La gobernadora del Banco de México (BdeM), Victoria Rodríguez, dijo esperar que el reciente aumento de la inflación general sea de corta duración y, si ese pronóstico resulta ser válido, podrían estar en juego más recortes de las tasas de interés.

Algunos analistas criticaron al BdeM por reducir su tasa de referencia en un cuarto de punto la semana pasada (a 10.75 por ciento), en una votación dividida de su junta directiva de cinco miembros, pese a que había señalado expectativas de una inflación más alta de lo anticipado.

A favor del recorte votaron Rodríguez y los vicegobernadores Galia Borja y Omar Mejía, mientras en contra estuvieron Irene Espinosa y Jonathan Heath.

Respecto a la posibilidad de futuros recortes de tasas de interés, Rodríguez dijo a Reuters que considera que el grado de apretamiento monetario tendría que irse adecuando al desenvolvimiento que exhiba el panorama inflacionario.

Se cree que la caída del peso, que a principios de este mes se debilitó a un mínimo de casi dos años frente al dólar, está impulsando la inflación, y el BdeM ha señalado que la posibilidad de una mayor depreciación de la moneda es un riesgo inflacionario.

La moneda, conocida en el pasado como superpeso, podría debilitarse hasta 21 pesos por dólar, previeron analistas encuestados por Reuters la semana pasada.

Una actividad económica más débil de lo esperado en México ha ayudado a compensar el impacto de la moneda depreciada, consideró Rodríguez.

La votación dividida sobre la reducción de la tasa clave en un cuarto de punto porcentual se produjo luego de que los datos de precios al consumidor de julio mostraron que la inflación general anual aumentó a 5.57 por ciento, por arriba de la tasa de junio, de 4.98 por ciento, como resultado de un aumento significativo en el componente no subyacente.

En su comunicado de política monetaria del pasado jueves, el BdeM revisó al alza su pronóstico para la inflación a fin de año a 4.4 por ciento desde 4 por ciento. Aún así, mantuvo su expectativa de que la inflación alcance su objetivo de 3 por ciento, más o menos un punto porcentual, en el cuarto trimestre de 2025.

Rodríguez comentó que espera que el proceso de desinflación en México continúe.

Hemos avanzado de manera importante; sin embargo, aún tenemos retos para llevar la inflación a su meta (...) Estaremos haciendo lo necesario para propiciar la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a su meta de 3 por ciento en el plazo previsto, explicó.