Un amplio grupo de trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) se movilizó ayer dentro y fuera de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en contra de la reforma, mientras otros marcharon hacia la Cámara de Diputados para demandar una mesa de diálogo directa con la Junta de Coordinación Política (Jucopo).

A las 15:08 horas, la puerta principal de la Corte –que llevaba casi dos años cerrada al público– se abrió para dejar salir a más de mil trabajadores y así dar paso a su manifestación contra la iniciativa presidencial, que los diputados federales prevén dictaminar el próximo lunes.

En la manifestación, convocada por el Colegio de Jóvenes Estudiantes de Derecho y Nuevos Profesionistas de la Corte, participaron desde empleados de intendencia hasta directores de área y coordinadores de ponencia de los ministros y otros trabajadores del sector, lo que de acuerdo con organizadores reunió a más de 2 mil personas.

Durante una hora resonaron consignas como ¡Si el pueblo se informa, no pasa la reforma!, Se ve, se siente, la Corte está presente! y ¡No somos oposición, servimos a la nación!

En la concentración hubo sólo dos oradores; uno de ellos, José de Jesús Cruz Sibaja, a quien se le conoce como La voz de la Corte, por ser el conductor de las sesiones del pleno.

Hoy la invitación es al pueblo de México para participar en un diálogo efectivo y saber que existe una carrera judicial con profesionalización y que se defiende la independencia y la imparcialidad de las personas, y es para beneficio de la democracia, de la libertad y de la justicia en México. Ese es el tema que hoy nos plantea esta concentración, expuso.

Durante la protesta hubo confrontaciones indirectas entre los empleados judiciales, manifestantes que mantienen plantones afuera de la Corte y transeúntes, quienes lanzaron gritos y reclamos contra los trabajadores del PJF, como corruptos, ladrones y pónganse a trabajar.

Los manifestantes intentaron formar una cadena humana que rodeara el edificio rectangular sede del máximo tribunal, que tiene una superficie de 7 mil 828 metros cuadrados, la cual no se cerró por desorganización y, además, por vallas policiales, que en un principio impidieron el paso a los manifestantes sobre las calles Erasmo Castellanos y Corregidora (que colinda con Palacio Nacional).

Otro grupo marchó desde el Palacio de Justicia hacia el Palacio Legislativo de San Lázaro, donde entregaron una carta para demandar diálogo con la Jucopo, a fin de exponer el efecto que tendrá la reforma sobre sus derechos y prestaciones laborales.

Personal de la Cámara únicamente recibió el escrito, que fue leído, a nombre de los 32 circuitos judiciales, por Óscar Alonso Yáñez Pallares.

Los manifestantes precisaron que la representación que buscó el diálogo no está encabezada por ninguna agrupación sindical, sino que es directamente la base trabajadora la que se mantiene en paro.