Trasladar la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) no significa militarización, aseguró ayer la presidenta electa, Claudia Sheinbaum Pardo, mientras en la Cámara de Diputados se discutía la reforma constitucional que pretende devolver al Ejército el mando operativo de esa institución, creada en este gobierno.

En breve entrevista, la próxima mandataria subrayó que se respetarán las garantías individuales. Los organismos internacionales no tienen por qué preocuparse, se van a respetar los derechos humanos, es la fortaleza de una institución y no significa militarización, por más que digan lo que digan.

Al mediodía, a su llegada a la casa de transición, mencionó que militarización quiere decir que un mando militar está tomando decisiones y en México es un poder civil. Las decisiones las toma el comandante o comandanta suprema de las fuerzas armadas, subrayó.

La presidenta electa ha venido diciendo que no es militarización transferir la Guardia Nacional a la Sedena porque esa dependencia no dictará la política de seguridad, la cual seguirá a cargo de la Presidencia de la República.

También ha precisado: nosotros construimos paz, no hacemos la guerra, esa es la gran diferencia.

Ha mencionado, además, que la Guardia Nacional es una institución de la Cuarta Transformación y se tiene que consolidar en varias áreas, porque tiene que ser primer respondiente en las tareas de construcción de la paz y seguridad.

Más tarde, la presidenta electa dio a conocer en redes sociales que la Academia Bonifaciana le otorgó el Premio Internazionale Bonifacio VIII por la Cultura de La Paz, por su trayectoria académica y política.