Lunes 10 de febrero de 2025, p. 30
Yuri Urive, integrante del Movimiento Social de la Tierra, urgió a las autoridades a aplicar el decreto –publicado hace más de cuatro meses– para declarar zona de restauración ecológica el área de influencia de la presa Endhó, en Hidalgo, a fin de atender los impactos ambiental y a la salud en ocho municipios del Valle del Mezquital, provocados por la contaminación crónica del río Tula con las aguas residuales y la actividad industrial.
Ante la falta de acciones concretas, la ambientalista aseguró en entrevista con La Jornada que se debe de crear un plan de remediación, obligatorio, tras su emisión, por el ex presidente Andrés Manuel López Obrador, el pasado 26 de septiembre en el Diario Oficial de la Federación. Con ello, señaló, se deben de atender las 36 mil 637.93 hectáreas del embalse, ubicado en Atitalaquia, Atotonilco de Tula, Tepeji del Río de Ocampo, Tepetitlán, Tezontepec de Aldama, Tlahuelilpan, Tlaxcoapan y Tula de Allende.
La presa fue construida entre 1947 y 1953, durante la presidencia de Miguel Alemán Valdés, entre los municipios de Tula de Allende y Tepetitlán, para el almacenamiento de agua limpia del río.
Con la activación del Túnel Emisor Central en 1975 comenzó a recibir las aguas negras e industriales del valle de México, contextualizó Urive, también vecina de este lugar.
A ello, indicó, se suma la instalación de la planta de Petróleos Mexicanos y la termoeléctrica, además las caleras, las constructoras y cementeras, cuyas emisiones afectan el suelo y el aire de la región.
El embalse se ha convertido en una gran letrina a lo largo de los años
, dijo.
El saneamiento se debe dar, resaltó, porque el estudio técnico justificativo para determinar el decreto, coordinado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, se demuestra que 60 por ciento de los pozos muestreados registran concentraciones de arsénico superiores al límite permisible y 70 por ciento de ellos tienen concentraciones de nitrato superiores al límite.
Señaló que esto ha elevado las muertes o los casos por insuficiencia renal o distintos tipos de cáncer.
También hay materia orgánica no biodegradable en todos los sitios monitoreados, principalmente en la cuenca del río. Además, 66 por ciento de los sitios estudiados presentan una alta contaminación por origen industrial, 48 por compuestos biodegradables y 58 por compuestos de aguas residuales domésticas.