Domingo 20 de abril de 2025, p. a27
El cantante puertorriqueño Gilberto Santa Rosa le dio candela al público que agotó las localidades del Auditorio Nacional, durante su presentación de su Auténtico World Tour, con la potencia de su voz, su característico baile y el ritmo imponente de la salsa, siempre –dijo– cantándole al amor
.
Con La agarró bajando y Un montón de estrellas, El caballero de la salsa atrapó con su ritmazo a los 10 mil asistentes que lo ovacionaron y acompañaron en gran coro. Gustosos, muchos hubieran abierto desde un principio una gran pista de baile al escuchar la inigualable voz del intérprete boricua que suma más de cuatro décadas de trayectoria.
Con Ahora o nunca y Cartas sobre la mesa, Santa Rosa continúo sin tregua el agasajo musical, el cual se intensificó con Conciencia. La multitud aplaudió el emblemático tema, mientras en los pasillos ya algunas parejas sacaban sus mejores pasos. Todos queremos bailar contigo
, gritó emocionada una de sus innumerables seguidoras.
Al tomar el micrófono, el artista puertorriqueño sostuvo que sus canciones giran en torno al amor, pero las de despecho son las más exitosas
y subrayó que los latinos hablamos con música
.
El cantante de 62 años expresó: estoy muy contento de estar con ustedes en esta noche de Sábado de Gloria y mañana domingo regresamos gracias a ustedes
.
Gilberto Santa Rosa llevó a un viaje musical y multisensorial con sus éxitos, desde aquellos que lo catapultaron a la fama en las décadas de los 80 y 90, hasta las canciones más recientes de su última producción discográfica. Recordó que el bolero y el romanticismo fueron sus orígenes en la industria y contó una anécdota de su infancia cuando una niña que le gustaba no le hizo caso, pero me regaló un oficio
. La historia de los primeros amores y decepciones hizo reír a los asistentes.

En escena, el intérprete, la orquesta y los coros sobresalieron con una producción escénica diseñada especialmente para estas fechas.
En los temas Sin voluntad, Mal herido, Me volvieron a hablar de ella y La marea ya los pasillos estaban, de nuevo, ocupados de cuerpos moviéndose al ritmo de los cautivantes y rítmicos sonidos.
El boricua invitó a Myriam Hernández para interpretar juntos No pensé en enamorarme. La compositora chilena después cantó Huele a peligro y El hombre que yo amo, con lo cual el recinto vivió otro momento íntimo y de romanticismo.
Con Déjate querer, Déjame sentirte y Suma y resta continuó el baile y el regocijo colectivo. Que ninguno se quede sentado
, invitaron los artistas desde el escenario y la fiesta multitudinaria se encendió.
La noche del elegante Caballero de la salsa fue una celebración a la música, a la vida y una locura cuando apareció Tito Nieves, otro reconocido boricua en el escenario, quien está celebrando 50 años de trayectoria.
La salsa poseyó a las miles de almas y se escuchó a todo pulmón Conteo regresivo, Vivir sin ella, Perdóname, Que alguien me diga y Que manera de quererte.
Gilberto Santa Rosa no sólo es uno de los máximos exponentes de la salsa, sino también un embajador de la música latina a escala mundial. Con más de 20 álbumes y múltiples premios, incluyendo varios Grammy Latinos, su legado musical es un referente para las nuevas generaciones de artistas y de audiencias..