Critican a la ultraderecha
Presidentes de Cuba, Chile y Colombia ensalzan el avance de la izquierda // En París hubo represión policial a decenas de manifestantes




Viernes 2 de mayo de 2025, p. 22
La Habana., Decenas de miles de latinoamericanos salieron ayer a las calles para conmemorar el Día Internacional del Trabajador, con demandas de mejores condiciones laborales y salarios dignos en una región donde casi la mitad de la población económicamente activa vive con empleos informales. En Europa, las movilizaciones del 1º de mayo reunieron a cientos de miles en el marco de un creciente descontento por la influencia militar y comercial de Estados Unidos en ese continente
En Cuba se realizó un multitudinario desfile por la Plaza de la Revolución, frente a las esculturas de los comandantes revolucionarios Ernesto Che Guevara, Camilo Cienfuegos y el prócer independentista José Martí.
Con un uniforme militar verde olivo, Raúl Castro, de 93 años, uno de los líderes de la revolución en la isla, junto con el presidente Miguel Díaz-Canel, encabezó la manifestación que reunió a cientos de miles de trabajadores y estudiantes desde la madrugada.
Esta celebración del Día de los Trabajadores (sic) en Cuba es una nueva demostración del respeto del pueblo cubano a su revolución
, aseguró el jefe de la Central de Trabajadores de Cuba, Ulises Guilarte de Nacimiento.
En las columnas de gente resaltaban los carteles con frases como Tumba el bloqueo
y Nuestras armas son nuestras ideas
, así como banderas cubanas con el rostro del fallecido líder revolucionario Fidel Castro, reportó el medio Cubadebate.
En Colombia, con la espada del héroe de la independencia Simón Bolívar en la mano, el presidente Gustavo Petro defendió sus reformas de izquierda en una marcha multitudinaria para presionar al Congreso, que debe decidir si aprueba una consulta popular propuesta por el gobierno.
Miles de personas atendieron el llamado del mandatario para protestar contra el Legislativo, que se niega a aprobar sus proyectos de ley para modificar los sistemas de trabajo y salud.
En Caracas, el presidente Nicolás Maduro se sumó a las conmemoraciones masivas; la oposición también se movilizó.
Al sur del continente, integrantes de las centrales sindicales argentinas se manifestaron el miércoles en víspera de la efeméride y en contra de las políticas de ajuste económico del mandatario ultraderechista Javier Milei. También rindieron homenaje al fallecido papa Francisco, del que resaltaron su preocupación por la precarización laboral y las clases más desfavorecidas.
La Paz, El Salvador, San José, Tegucigalpa y Panamá fueron escenario de más activismo por la clase trabajadora, entre otros puntos de América Latina.
En Perú, más de mil obreros de varios sindicatos marcharon por las calles de Lima en demanda de respeto a las ocho horas diarias de trabajo, en un país en el que 71 por ciento labora en la informalidad; es decir, sin derechos plenos, en cifras del ministerio de Trabajo, mientras en Chile las movilizaciones coincidieron con el acuerdo que se alcanzó con el gobierno de Gabriel Boric para aumentar el salario mínimo de 540 a 570 dólares a partir de enero de 2026, asunto que aún debe ser respaldado por el Congreso.
Condenan la influencia de Donald Trump
En Europa, líderes sindicales franceses condenaron la trumpización
de la política mundial en medio de movilizaciones que se unificaron bajo la ira ante la agenda del magnate estadunidense con sus agresivos aranceles que avivan los temores de inestabilidad económica mundial y sus medidas enérgicas contra la migración.
Al menos 30 personas fueron detenidas en París, informó la cadena BFMTV, y se documentaron actos policiales represivos.
El líder de izquierda Jean-Luc Mélenchon condenó el papel de Washington en la inestabilidad global, y acusó a Estados Unidos de empujar a Europa hacia el conflicto y la subordinación económica.
En Italia, ciudadanos marcharon con un muñeco del presidente estadunidense por las calles de Turín.
En Alemania, dirigentes sindicales advirtieron que las jornadas laborales extendidas y el creciente sentimiento antimigrante desmantelan las protecciones laborales. En Berna, Suiza, miles salieron a las calles con pancartas que denunciaban el fascismo y la guerra, como parte de una reacción más amplia contra el auge global de la política de extrema derecha.
Miles más lo hicieron por las principales arterias de Madrid, Barcelona y otras ciudades españolas, con demandas que iban desde una semana laboral más corta hasta respuestas por el histórico apagón que sufrió la Península Ibérica a principios de esta semana.
En Turquía, la efeméride de la clase asalariada sirvió de plataforma no sólo para los derechos laborales, sino también para exhortar a la defensa de los valores democráticos. Decenas de miles se reunieron en la orilla asiática de Estambul, en Kadikoy, para una movilización donde algunos protestaron por el encarcelamiento del alcalde opositor de esta ciudad, Ekrem Imamoglu.
Las autoridades bloquearon el acceso al centro de Estambul y cerraron líneas de transporte público. Según una asociación de abogados, más de 400 civiles fueron arrestados antes de la tarde cerca de la Plaza Taksim, incluidos litigantes que observaban las detenciones.
Movilizaciones similares se efectuaron además en Roma, Atenas Lisboa, Ámsterdam, Copenhague, Belgrado, Pristina, Zagreb, Skopje, Tokio, Manila, Yakarta, Phnom Penh, Colombo, Dacca, Túnez, Bagdad y Seúl, entre otros puntos del planeta.