Miércoles 7 de mayo de 2025, p. 3
Washington. La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció una de las mayores incautaciones de fentanilo en la historia del país: 11.5 kilogramos del opioide decomisados al cártel de Sinaloa en Nuevo México. En conferencia de prensa, Bondi afirmó que se actuó contra una de las organizaciones de narcotráfico y terrorismo extranjero más grandes y peligrosas
.
Bondi no descartó enviar a los detenidos a la prisión de Alcatraz, recientemente reabierta por orden del presidente Trump. La operación, liderada por la DEA con apoyo de agencias locales, logró confiscar 3 millones de pastillas, 35 kilogramos de metanfetamina, 4.5 de heroína, 7.5 de cocaína, 11.5 de fentanilo en polvo, 49 armas y cerca de 5 millones de dólares en efectivo.
Cada pastilla estaba marcada como si fuese oxicodona, un analgésico opiáceo utilizado para tratar dolores intensos. Estas píldoras en realidad estaban envenenadas con fentanilo. Imagínense lo que iba a llegar a nuestras calles
, alertó Bondi.
El fiscal del distrito de Nuevo México, Ryan Ellison, detalló que fueron detenidas 16 personas, seis de ellas sin autorización legal en aquel territorio, incluido el presunto líder del grupo: Heriberto Salazar Amaya, migrante mexicano de 36 años con dos deportaciones previas y residente en Salem, Oregon. Según la DEA, las drogas se distribuían en Albuquerque, Phoenix y Utah.
Por la cantidad de drogas, dinero y armas, es probable que muchos de los detenidos, si son condenados, pasen el resto de sus vidas en cárceles estadunidenses, quizás incluso en Alcatraz
, reiteró Bondi.Pertenecían al cártel de Sinaloa
El gobierno de Trump considera al cártel de Sinaloa una organización terrorista global, a la que responsabiliza de gran parte del tráfico de fentanilo, causante de unas 75 mil muertes anuales en Estados Unidos. Las autoridades sanitarias advierten constantemente sobre pastillas falsificadas que parecen medicamentos recetados pero que contienen fentanilo ilegal.
Bondi declaró en entrevista reciente con Fox News que, en tres meses, el gobierno republicano ha incautado 22.5 millones de dosis de fentanilo, afirmando que con ello se han salvado 119 millones de vidas. El 30 de abril, en una reunión de gabinete, dijo que el decomiso de esas dosis evitó la muerte de 258 millones de personas.
En contraste, bajo el gobierno de Biden, la mayor incautación individual ocurrió en agosto de 2024, cuando se decomisaron 4 millones de pastillas de fentanilo en Arizona, con un peso total de 450 kilos, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.