a complejidad de las relaciones entre militantes del cristianismo, islamismo y judaísmo no permite visualizar claramente lo que existe más allá de las creencias espirituales. ¿Cómo saber si en realidad es una revancha entre las religiones que existían en Palestina, territorio ocupado, y el otro judaísmo que llegó de fuera?
Las masacres que libremente comete el gobierno sionista contra el pueblo palestino no se pueden argumentar como mandato religioso. Son claramente crímenes de lesa humanidad. Su mirada como gobierno invasor es, por supuesto, desde un punto de vista económico, y no sólo religioso o político. Invade para favorecerse y favorecer al gobierno de Estados Unidos, su creador, y si para lograrlo fue necesario asfixiar la economía palestina, así lo ha estado llevando a cabo.
¿Cuánto cuestan las matanzas al pueblo palestino? ¿Cuánto ha costado la guerra en Gaza a Israel? Existen diversos cálculos. La cifra aproximada es de más de 67 mil millones de dólares, aunque, estimamos que los cálculos del gobierno israelí tendrán que cambiar, pues las disposiciones para seguir apoyando los ataques de Netanyahu al pueblo de Gaza, al parecer, están cambiando.
Podríamos decir que, en este asunto de la guerra irracional, como todas las de Estados Unidos, Israel y compinches europeos, la democracia no tiene ningún significado. Y no lo tiene porque esos países no han consultado a sus pueblos si quieren ir a matar inocentes para que Israel se apropie de territorio ajeno.
En los minutos que nuestros estimados lectores leen el presente artículo, decenas de palestinos de todas las edades, hombres y mujeres están muriendo a manos del ejército israelí.
Es importante reflexionar sobre la exorbitante cantidad de dólares invertidos en esta bestial andanada. Las estimaciones fluctúan, de acuerdo con el doctor Jesús López Almejo y Elías Zananiri, analista geopolítico y vicepresidente de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), respectivamente, según las decisiones que se toman en la Casa Blanca.
Desde la primera invasión sionista a Palestina, la importancia económica de este país era atractiva para Europa y, por supuesto para inversionistas de varios otros que veían el potencial económico del país árabe, como Inglaterra, Francia y Estados Unidos.
Israel utiliza herramientas políticas y económicas para presionar a la Autoridad Palestina de todas las maneras posibles, con el fin de mantenerla por debajo de su competencia y perturbar su desempeño
. Es un hecho que el desarrollo económico de Palestina al momento de ser invadida era ya importante para el comercio de Medio Oriente y de algunos países europeos, aunque esa región no era reconocida por la comunidad internacional o más bien por la ONU como Estado árabe libre y soberano.
Mu’ayyad Afaneh, economista y analista palestino, explica que el debilitamiento económico de Palestina comenzó desde la invasión. Asegura que si la ocupación israelí no hubiera ocurrido en 1967, la economía de su país podría haber sido el doble de su tamaño antes de la guerra actual o probablemente incluso más.
La afirmación anterior, de Afaneh, se convirtió en una verdad comprobable. Señala que después del 7 de octubre de 2023, Israel confiscó 275 millones de shekels (74.8 millones de dólares) del dinero que la Autoridad Palestina utilizaría para financiar los servicios públicos de la franja de Gaza, como educación, sanidad, electricidad y agua, cantidad que en 2024 se transfirió a Noruega, como parte de un programa de financiamiento, para su pago, una vez que Israel diera su consentimiento.
Pero, como ya sabemos, los planes de Israel, país antidemocrático, no sólo no dieron luz verde para liberar el pago, sino que continuó avanzando en la ocupación territorial para someter económicamente al gobierno palestino. Recordemos que en cada avanzada para ocupar territorio árabe, la dinámica comercial se detiene, pues innumerables establecimientos comerciales y pequeñas industrias se cierran por temor al saqueo. Además del robo al gobierno palestino, Israel expulsó a Noruega de esta negociación por el hecho de haber reconocido a Palestina como Estado libre y soberano.
Una de las estimaciones del gasto absurdo para financiar la guerra del gobierno israelí se considera en 10 mil 800 millones de euros al mes, cifra que ya ha rebasado el límite calculado por el propio gobierno sionista.
La Oficina Central Palestina de Estadísticas demostró que son enormes las pérdidas económicas, tanto del sector privado como del estatal. Aproximadamente, el daño llega a 2 mil 300 millones de dólares entre octubre de 2023 y enero de 2024, suspensión casi total de la producción que involucró a cerca de 56 mil establecimientos comerciales e industriales, sólo en la franja de Gaza, donde el comercio interno constituye más de la mitad de los establecimientos locales.
Pero la mayor pérdida, invaluable en dólares, o en cualquier otra moneda, son las miles de vidas perdidas del pueblo palestino y las secuelas mortales de víctimas del pueblo árabe judío.
Para Ximena Guzmán Cuevas y José Muñoz Vega la justicia llegará.
(Colaboró Ruxi Mendieta)