Miércoles 20 de agosto de 2025, p. 28
Habitantes de 14 pueblos y 17 barrios de Xochimilco que iniciaron la defensa del museo Dolores Olmedo solicitaron a la alcaldesa de la demarcación, Circe Camacho, respaldar su solicitud de que el espacio cultural que alberga obras de Diego Rivera y Frida Kahlo siga teniendo como sede la ex hacienda de La Noria, localizada en avenida México número 5843, colonia La Noria.
Asimismo, piden que, como dejó estipulado Dolores Olmedo, sea en este recinto donde continúe la exhibición de dicho acervo cultural, se transparente la información del fideicomiso que se creó para su conservación y la apertura inmediata del museo.
La solicitud está respaldada con 301 firmas de residentes de la jurisdicción ante el temor de que las obras de Frida y Diego sean trasladadas al parque urbano Aztlán.
En la misiva, que fue entregada en la secretaría particular de la alcaldía el 15 de agosto pasado, exponen que Dolores Olmedo Patiño compró la hacienda en 1962 para vivir en ella, pero en 1994 se convirtió en un espacio cultural, donde además de las obras de los dos artistas mencionados también había exhibiciones de Pablo O’Higgins y Angélica Beloff, así como un gran conjunto de obras prehispánicas.
En 2002, meses antes de su muerte, Dolores Olmedo formalizó el contrato de fideicomiso Museo Dolores Olmedo Patiño, donde ella y Multibanco Comermex SA quedaron de fideicomitentes; Nacional Financiera de Crédito es la fiduciaria y el pueblo de México el beneficiario.
En el documento, que se elevó a escritura pública, , afirmaron habitantes de Xochimilco, Olmedo expresó su voluntad para que el acervo cultural sea para beneficio del pueblo y que la exhibición de las obras debería quedar en el museo que lleva su nombre.
“Fallecida la fideicomitente Dolores Olmedo Patiño, no podrán salir del domicilio del museo los bienes que integran el patrimonio del fideicomiso”, menciona el citado contrato.
Tras el anuncio que hicieron las autoridades de la apertura de una nueva sede del museo en el parque urbano Aztlán, los vecinos exigen se respete los estipulado en el fideicomiso y la apertura inmediata del museo, que desde la pandemia cerró sus puertas.