Economía
Ver día anteriorMartes 21 de octubre de 2025Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Estrechez infantil es la más alta de la UE

Al borde de la pobreza, 12.5 millones de españoles
Foto
▲ El crecimiento económico en España no se ha traducido en una reducción clara de la pobreza y la desigualdad; de hecho, una cuarta parte de la población está en riesgo de sufrir un mayor deterioro de su calidad de vida. La imagen, durante un cacerolazo en Madrid en la crisis de 2012.Foto Ap
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 21 de octubre de 2025, p. 25

Madrid. España, el país con una de las tasas de crecimiento más vigorosas de la Unión Europea (para este año se prevé un avance de 2.9 por ciento), es también uno de los que padecen más desigualdad, desempleo juvenil crónico y, lo más preocupante, índices de pobreza infantil que han empeorado con los años.

Un informe reciente de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza, elaborado con datos micro y macro de 2024, constató que en España hay cerca de 12.5 millones de personas (25.8 por ciento de la población) que están en riesgo de caer en la pobreza y que 4 millones ya se encuentran en esa situación, con ingresos mensuales por familia que no superan 644 euros (13 mil pesos mexicanos).

Mercedes Carretón, vecina de Castilla La Mancha, de 57 años y quien vive con sus dos hijos desde hace más de dos lustros, explicó que ni su salario ni las escasas ayudas que recibe del Estado le ayudan a solventar sus necesidades básicas. “Con mi trabajo no llegaba. Teniendo la edad que tengo, no encuentro otro trabajo, y en uno que encontré me dijeron que no era compatible por la edad. Tuve que salir. Eso hace que te sientas muy vulnerable”.

Su testimonio se repite entre la franja de población que vive en la pobreza o está en el umbral. Informes como el realizado por la institución europea cuestionan el modelo de desarrollo, pero también el sistema de bienestar creado en Europa para atender a las personas más vulnerables.

Según el informe, la proporción de personas en riesgo de pobreza o exclusión social en España se ha reducido, pero la mejora no es suficiente para favorecer a la población que vive en condiciones más precarias.

El informe muestra una ligera mejoría en relación con el año anterior (200 mil personas menos en pobreza); sin embargo, esta mejora no ha servido para reducir la desigualdad en las regiones con mejores indicadores. Además, el mapa de la pobreza en España muestra grandes desigualdades, no sólo entre el norte y el sur, sino también en regiones con mejor desempeño, como el País Vasco, Navarra o Baleares, donde más de 45 por ciento de las personas en riesgo de pobreza viven con menos de 644 euros mensuales.

Al presentar el informe, el presidente de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza, Carlos Susías, explicó que este fenómeno es “una decisión política, no un accidente meteorológico; por eso hay que tomar medidas para acabar con la desigualdad, que cada día se va ensanchando. Nuestras políticas de protección social son ineficientes e insuficientes”.

De acuerdo con el informe, las carencias afectan a casi la mitad de la población y ni el aumento del PIB o la creación de empleos consiguen mejorar las cifras. La Comunidad de Madrid es un ejemplo: registra una de las rentas medias por persona más altas del país y, sin embargo, es una de las regiones más desiguales. Ahí, el 20 por ciento más rico gana cinco veces más que el más pobre.

Estos datos contrastan con el crecimiento macroeconómico del país en años recientes. Los autores del estudio subrayan que esta mejoría no ha podido mejorar “en forma efectiva la calidad de vida” y advierten que no se cumplen “la inversión social ni el papel protector del Estado con políticas que refuercen la cohesión social y territorial”.

Carlos Cuerpo, ministro de Economía del Ejecutivo presidido por el socialista Pedro Sánchez, advirtió cuando asumió el cargo que “no se trata de crecer por crecer; la economía tiene que crear los mecanismos para que haya una verdadera redistribución de la riqueza”, que es precisamente lo que, según el informe, no se está logrando, al igual que el otro gran compromiso del funcionario: lograr que “las salarios más bajos, los de los jóvenes, crezcan”.

No sólo los sueldos son precarios, sino también las oportunidades de trabajo. España es, junto a Estonia y Rumania, el país con la mayor tasa de desempleo juvenil, con 25.3 por ciento, muy lejos de Alemania, Países Bajos o Suiza, donde no supera 5 por ciento.

Otro gran problema estructural de la economía española es la falta de acceso a la vivienda para los más jóvenes e incluso para los mayores. Según el informe, conseguir un techo se ha convertido en un desafío cada vez mayor que obstaculiza la estabilidad y el progreso de muchas familias. “La crisis habitacional se ha consolidado como un factor clave de empobrecimiento, en parte porque el mercado concentra la propiedad de las viviendas en unas pocas manos, lo que ha provocado un aumento de precios sin precedentes”.

Este incremento es evidente sobre todo en los alquileres, que en promedio han subido 39.3 por ciento en 10 años, casi el doble de la cuota hipotecaria. Esta alza se ha agudizado especialmente en los principales destinos turísticos del país como Baleares, Canarias, Barcelona o Madrid.

En comparación con otros países europeos, España lidera todos los indicadores comunitarios de pobreza, exclusión y desigualdad, y es el cuarto Estado con mayor porcentaje de personas en esta situación, sólo detrás de Bulgaria, Rumanía y Grecia. A los autores del informe les preocupa especialmente la tasa de pobreza infantil, la más alta de la UE, con 2.3 millones de niños en esta situación.

Carmen Meroño, madre soltera que con 50 años se quedó sin trabajo y sin casa, relata: “Murió mi padre y eso me hundió aún más la vida. Era un sustento para mí, me ayudaba mucho. Yo tenía un sitio donde dormir, pero sin dinero para nada, ni para mi hijo. Con la ropa, rezaba para que no engordase y que le sirvieran los pantalones del año anterior”.