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El Channel One sound system dio una clase magistral de reggae en la Alhóndiga
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Periódico La Jornada
Sábado 25 de octubre de 2025, p. 4

Guanajuato, Gto., El Channel One sound system puso de pie al público de la Alhóndiga con una lección magistral de reggae, en uno de los actos destacados del Festival Internacional Cervantino (FIC).

Mikey Dread, el selector musical y Michael, el maestro de ceremonias, que en la cultura jamaiquina se llama toaster, son Channel One, histórico sound system de reggae y ritmos jamaiquinos radicados en Londres. El sound system, es decir, sistemas de sonido que acumulan la mayor cantidad de bocinas posibles al nivel del suelo, es precursor de la música tecno, de la cultura del diyéi, de la producción musical moderna, y también contiene numerosas conexiones con el sonidero mexicano.

“Esto es reggae y se baila de pie”, dijo Mikey y el público en la Alhóndiga obedeció al instante, cautivados por el ruido de la aguja acariciando el disco de vinilo. Fue un diyéi set, pero también una clase didáctica, en la que el selector se paseó por los comienzos del reggae, influenciados por las armonías vocales del doo-woop, producto de la colonización británica en 1965, hasta el raggamuffin, aceleración rítmica y vocal, precursora del rap, aparecida a finales de los años 70.

La canción que más prendió a la audiencia fue I Chase the Devil, versión original de Max Romeo & The Upsetters, una de tantas rolas memorables grabadas y producidas por Lee Perry (1936-2021), uno de los cerebros musicales más destacados del enorme caudal de discos originales salidos de Kingston. En el patois, forma criolla de expresarse en inglés de los cultores de la religión rastafari, I significa simultáneamente vos y yo, por lo que I Chase The Devil podría traducirse como Nosotros perseguiremos al diablo.

La presentación de Channel One se repitió de forma gratuita en el contexto del Circuito Cervantino en Cuernavaca, León, Celaya y Ciudad de México, donde, según la organización del Centro Nacional de las Artes batieron récords de audiencia, al convocar a más de 11 mil personas el domingo pasado.

La mañana del concierto, Channel One ofreció una entrevista a La Jornada. A Mikey le brillaron los ojos cuando habló de los discos de vinilo que no saca de gira mundial: “Hay música que solía coleccionar hace mucho tiempo y esos discos nunca abandonan mi casa, no los saco porque me recuerdan a mi juventud en los años 60; los considero muy sagrados. Hay ciertos acetatos que no abandonan mi hogar, los de los sellos Treasure Isle y de Studio One, especialmente los elepés; si se rompen, no podría conseguirlos otra vez”.

Mikey ofrece algo del contexto político migratorio en el que se desenvolvió su cultura: “La parte política del reggae se desarrolló en Inglaterra peleando contra el establishment; entonces, los toasters solían tener agenda política dentro de los sets de reggae; decían cosas que no ibas a escuchar en los medios. Ir al baile era como leer un periódico que refería a asuntos desconocidos”.