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ELIAN, REHEN DEL ANTICASTRISMO
En lo que constituye el mantenimiento de una abierta vulneración de los principios básicos de la justicia y de valores fundamentales que rigen la vida civilizada de los individuos y las sociedades, un tribunal de apelaciones de Atlanta determinó retener al niño cubano Elián González en Estados Unidos.
El fallo de la Corte señala que el pequeño no podrá salir de territorio estadunidense en tanto no se resuelva la apelación -presentada por los parientes lejanos del menor afincados en Miami- contra una resolución judicial que ordena la entrega de Elián a su padre, Juan Miguel González.
Con este fallo, no sólo se prolonga la dolorosa saga del balserito -utilizado como bandera política sin importar que con ello se ponga en riesgo la salud física y moral del niño-, sino que se exacerban los ánimos de quienes pretenden impedir a toda costa que Elián sea devuelto a su padre. Además, el veredicto mantiene a este último en la necesidad de prolongar forzosamente su estancia en Estados Unidos hasta que se resuelvan por completo todos los laberintos legales -inducidos artificialmente por los anticastristas de Miami- de este dramático caso.
Por añadidura, la determinación de la Corte de apelaciones tiene un filo peligroso: dado que no hace referencia a la custodia del menor -y por tanto deja abierta la posibilidad, como ha señalado la procuradora estadunidense Janet Reno, de que Elián sea devuelto a su padre, aunque no puedan abandonar la Unión Americana- la resolución puede dar pie a que las remisas autoridades estadunidenses se decidan a hacer cumplir la ley por la fuerza, con el consiguiente riesgo para la integridad física del pequeño.
La retención de Elián en Estados Unidos y la vulneración de los derechos de patria potestad de su padre constituyen, a todas luces, acciones ilegales e inhumanas a las que debe ponerse fin de inmediato. Tolerar que los anticastristas radicales controlen el futuro del niño y se burlen abiertamente de la ley representa un retroceso para la justicia y para la vigencia de los derechos más elementales.
Finalmente, cabe señalar que en todo este enredo tienen mucho que ver las consecuencias nefandas del bloqueo estadunidense contra Cuba -circunstancia que ha propiciado el fortalecimiento de los anticastristas radicales de Miami- y el doble rasero con el que Estados Unidos aborda asuntos tan importantes como la defensa de los derechos humanos. ƑCon qué legitimidad condena Washington la situación de esas garantías en Cuba si no es capaz de hacerlas valer en su propio territorio?
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