Señora directora: Le suplico publicar esta carta dirigida al doctor Ernesto Zedillo Ponce de León, Presidente de México. 

Señor Presidente, comenzaré por señalarle que con la independencia que cobró la nación en 1821, los indios mexicanos empezaron a perder, paulatina y rápidamente los derechos y bienes que les habían sido respetados por la Corona española, como lo eran sus tierras comunales y los derechos que tenían para designar a sus autoridades. Asimismo, desaparecen de la escena política del naciente país, las Leyes Generales de los Reinos de Indias ?promulgadas en Madrid? que defendían a los indígenas de la voracidad de gran parte de los españoles, el juzgado de indios en donde los nativos ventilaban sus asuntos judiciales en contra de los hispanos, principalmente, y el abogado real de indios, que era el litigante responsable de llevar esos asuntos. A todo eso hay que añadir que, como vasallos de la Corona, no se podían enajenar las tierras indígenas, ya que constituían el medio necesario para la obtención de los productos requeridos para su subsistencia. 

Señor, el historiador Enrique Florescano manifiesta ?en su libro Etnia, Estado y nación? que en diez estados del joven país, los Congresos locales aprobaron, de 1825 a 1833, leyes que ponían fin a la propiedad comunal de la tierra indígena. A continuación, las leyes centralistas de Santa Anna de 1836 permitieron, también, afectar los derechos de los nativos. Posteriormente, la Ley liberal Lerdo, de 1856, ordenaba la venta forzosa de bienes inmuebles, entre ellos, las tierras de propiedad comunal de los pueblos indios. En los años de 1883 y 1894 ?época de Porfirio Díaz? fueron promulgadas leyes que fundamentaban la venta de terrenos baldíos, habiéndose vendido unos 40 millones de hectáreas (Ha), parte de ellas de propiedad indígena. A continuación, los gobiernos de Alvaro Obregón y de Plutarco E. Calles fueron indiferentes a los problemas que aquejaban a los indios. Recientemente, Carlos Salinas de Gortari reformó el artículo 27 constitucional, lo cual permite la confiscación de tierras por causas de utilidad pública. 

Señor presidente, basado en esa reforma, usted le confiscó a los indios yaquis de Sonora cerca de 3 mil Ha. de tierras fértiles, mismas que entregó a particulares. En la misma tesitura, acaba de comprarles, a la fuerza, a los indios de Amador Hernández, Chiapas, 3.5 Ha., que el Ejército utilizará para construir instalaciones militares. Finalmente, deseo recordarle la militarización que ha hecho de numerosas zonas indígenas del país, principalmente en Chiapas, Oaxaca, Guerrero. 
 
Dr. Julio Molina Esquivel 
 

Señora directora: En relación con la nota aparecida el día 15 de noviembre pasado sobre la construcción de un centro comercial colindante con la Catedral de Texcoco de Mora, estado de México, me permito hacerle las siguientes precisiones: 

La autorización para construir un centro comercial, esto es, autorizar un uso de suelo específico, es competencia del Ayuntamiento de Texcoco. Este instituto no cuenta con facultades legales para decidir en ese sentido, por lo que el INAH no puede impedir la construcción del centro comercial, pero sí puede regular el proyecto para que se subordine cabalmente a la dignidad del monumento. 

En primera instancia, la Controladora Comercial Mexicana liberó el predio para realizar su proyecto constructivo al cumplir con el salvamento arqueológico de ley tramitado ante el centro INAH estado de México, con lo que se dejó a salvo el patrimonio arqueológico. 

El artículo 6 de la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticos e Históricos faculta al instituto para regular las obras en inmuebles colindantes a un monumento histórico, de hecho, en estos términos se han suspendido parcialmente los trabajos de esa obra a lo largo de toda la crujía constructiva colindante a la Capilla de la Tercera Orden y a la Catedral desde el 12 de octubre del presente año. 

La suspensión obedece a que el proyecto agrede las características del monumento y atenta contra la memoria histórica de la población respecto de lo que fue la huerta del ex convento franciscano, donde se fundó la primera escuela de carácter occidental en el Continente Americano a instancias de Fray Pedro de Gante. 

Actualmente, la Controladora Comercial Mexicana ha presentado un nuevo proyecto que se encuentra en revisión por parte de este instituto, con el objeto de ajustar la propuesta a las necesidades del monumento y en su caso, autorizar la continuación de las obras. En su momento, el INAH resolverá lo procedente conforme a la ley. 
 
Arquitecto Salvador Aceves García, coordinador nacional 

Señora directora: ¿Cómo creerle a Vicente Fox y a su asesor laboral?, cuando afirman que "los trabajadores del gobierno federal deben estar tranquilos a partir del 1o. de diciembre no se va a despedir a nadie, no se crean de los rumores, les aseguro que nadie va a perder su trabajo, sus derechos se van a respetar". 

Mientras en Nuevo León, entidad gobernada por su partido, la Secretaría de Educación en el estado a empezado a reprimir a los trabajadores de la educación de la Universidad Pedagógica Nacional, Unidad 19 A de Monterrey, que pertenecemos a UPN Ajusco en la ciudad de México. 

Hechos, el 31 de octubre se retiene el salario de ocho catedráticos y el 8 de noviembre cesan a cinco con efectos retroactivos al 1o. de noviembre, sin importar que se desatienden grupos a mitad del semestre septiembre 2000-febrero 2001. 

En total, ahora quedamos 46 personas como personal de la UPN, de la Unidad 19 A. 
 
Profesor Faustino Celestino Martínez 

En la lista de integrantes del gabinete de Andrés Manuel López Obrador publicada en la página 39 de nuestra edición de ayer se menciona a Julieta Campos Egurrola como próxima titular de la Secretaría de Turismo del Gobierno del DF. En realidad, el nombramiento recayó en la escritora Julieta Campos, cuya obra más reciente es ¿Qué hacemos con los pobres? Ofrecemos disculpas por tan lamentable error a la conocida ensayista y a nuestros lectores.