Reflexión sobre las contradicciones de la justicia
Señora directora: Dice Norberto Bobbio,
el gran pensador italiano, que "la guerrilla es típicamente de los
Estados en que existen profundas injusticias sociales". Esto es cierto
y nos lleva a pensar que si los jóvenes, y sus amigos, que han sido
encarcelados en el infierno de Almoloya (ahora "La Palma") fueran guerrilleros
?sin concederlo, pues existen ambigüedades e irregularidades en la
investigación, además de la sospecha de que sufrieron torturas
de las que no dejan huella? serían luchadores sociales que se enfrentan
a la injusticia. ¿Por qué entonces están en Almoloya?
¿Por qué ese exceso? ¿Por qué no se compone
lo que en la sociedad anda mal?
La subprocuradora Luz María Lima Malvido, de la
PGR, dice que esa institución no persigue a las personas ni le interesa
que estudien en algún centro, ni su ideología. Persiguen
sólo conductas delictivas. Está bien. Pero ¿acaso
en derecho no cuenta la intencionalidad y el móvil? ¿No es
cierto, si se ven las cosas con humanitarismo, que su móvil y su
intención conducen a resultados generosos, desinteresados y colectivos?
El caso es que las leyes y la conducta de los funcionarios
no son equitativos. Los llamados "delincuentes de cuello blanco" como Cabal
Peniche, Espinosa Villarreal, El Divino o Lankenau, que delinquieron
por razones egoístas, intencional e interesadamente en contra de
México, no sólo no van a Almoloya, que es donde debieran
estar, sino que andan libres. Y cuando eventualmente llegan a prisión,
se les libera al poco tiempo, quedando después multimillonarios
ellos y sus familias. ¿No es esto abominable y profundamente inmoral?
José María Castillo Farreras, profesor
universitario
Precisiones de CEDHJ
Señora directora: Leí con atención
la nota del señor Víctor Ballinas el 26 de septiembre pasado.
Solicito se admitan algunas precisiones y datos con la intención
de enriquecerla:
La Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco
(CEDHJ) no encontró elementos que presumieran constitución
de delitos atribuibles a servidores públicos, por lo que es inexacto
el encabezado de la nota. De las ocho quejas (no nueve) que refiere la
recomendación 20/2001 emitida por la CNDH, en los únicos
casos en que se detectó presunción de delitos éstos
fueron cometidos por particulares; en el otro, por funcionarios de una
agencia del Ministerio Público.
En la actualidad todos los involucrados están siendo
procesados en sus diversos ámbitos; la CEDHJ pidió a las
autoridades de la PGJ que se concluyeran las indagatorias, se consignara
a los responsables y se abriera un procedimiento administrativo cuya sanción
podría ser la suspensión de sus cargos. En ambos casos, no
se trata de adopciones ni intervino el Consejo Estatal de Familia (CEF).
Todos los datos están sustentados con documentos.
Otra de las quejas se encontraba archivada cuando la CNDH
intervino porque estaba debidamente conciliada obteniendo una sanción
impuesta a una funcionaria del CEF. Este caso es de un niño severamente
maltratado por quien dijo ser su padre, mismo que ya había sido
sentenciado en el proceso 178/99 del juzgado penal de Chapala, Jalisco.
Sólo en dos quejas había procedimientos de adopción
que nunca culminaron. También estaban concluidas y, cuando la CNDH
intervino, se encontraban en la etapa de acreditación de las conciliaciones
que se dictaron, todas aceptadas por las autoridades porque las irregularidades
cometidas por el CEF son convalidables legalmente, ya que las principales
violaciones fueron cometidas por los presuntos familiares cuando los descuidaron
o abandonaron.
Todos los niños, a excepción de dos, presentaban
el síndrome del niño maltratado.
Las irregularidades que la CEDHJ encontró y sustentó
con pruebas fehacientes fueron de procedimiento, ya que las averiguaciones
que se iniciaron por tales motivos no siguieron su causa. El CEF no se
cercioró de los orígenes de los niños; se ejercitaron
acciones legales equivocadas e insuficientes, y a los presuntos familiares
no se les buscó y orientó debidamente para que acudieran
ante la autoridad judicial a acreditar su parentesco y reclamar la posesión
de los menores involucrados.
Las autoridades no privaron de sus derechos fundamentales
a los presuntos familiares, sino que éstos no los ejercieron en
tiempo y forma.
Me permito hacer referencia a la recomendación
de mérito porque registra algunos equívocos que pudieron
haber hecho la diferencia en los criterios que siguió la resolución.
Un ejemplo de ello es cuando se señala que en uno de los casos (pp.61
y 62) el CEF inició una adopción internacional con una pareja
de españoles, cuando en realidad se trataba de una custodia y los
presuntos solicitantes son jaliscienses.
Hago votos porque la diferencia de criterios entre las
comisiones públicas de derechos humanos no sea utilizada para otros
fines que no sean los de proteger y promover los derechos humanos.
María Teresa Medina Villalobos, cuarta visitadora
general de la CEDHJ
En contra de que los trabajadores paguen el costo de
la crisis
Señora directora: Le enviamos la presente
para agradecer que este importante diario haya cubierto la información
del acto sobre despidos que realizamos el día 21 de septiembre y
para hacer una necesaria aclaración El Correo Ilustrado.
En la empresa Euzkadi, tal como dice la nota firmada por
el compañero periodista Juan Antonio Zúñiga, tenemos
en la actualidad 73 despedidos que mantienen su demanda de reinstalación;
16 de la planta 4 de El Salto, Jalisco, y 57 de la planta 3, cerrada ilegalmente
en noviembre de 1999, en La Presa, estado de México.
Continental Tire, el grupo industrial de origen alemán
que actualmente es el dueño mayoritario de Euzkadi, nos anunció
recientemente que ante la actual situación de crisis había
dos opciones: el despido de otros 300 compañeros o dos paros técnicos
de una semana a realizarse en septiembre y octubre, respectivamente.
Nuestra organización en asamblea general decidió
rechazar los despidos y aceptar las dos semanas de paro, pero también
decidió realizar otras acciones, entre ellas, el mitin de que informa
la nota para exigir la reinstalación de los 73 compañeros,
además de hacer un frente común con todas las organizaciones
sindicales que enfrenta el grave problema de los despidos.
Incluso, aunque hasta ahora la empresa ha respetado el
acuerdo, no está descartado que después de los paros técnicos
plantee la misma alternativa, por lo que estamos decididos a reiterar nuestro
rechazo a que seamos los trabajadores quienes paguemos el costo de la crisis,
que, desgraciadamente, se ha visto agravada por los lamentables acontecimientos
en EU.
Javier Jiménez G., secretario del Exterior del
SNRTE
Pide ayuda a delegado en Iztapalapa para encontrar
a su hijo
Señora directora: Por este medio solicito
la ayuda del delegado en Iztapalapa, René Arce, para localizar a
mi hijo Jorge Alejandro Rojas Valencia de 28 años, desaparecido
desde el día 14 de septiembre. Ese día acudió a trabajar
en el exterior de la estación Tepalcates de la línea A del
Metro, donde vendía artesanías.
Hemos buscado hasta la desesperación y, sin embargo,
la angustia comienza a desolarnos. Le ruego al delegado su apoyo, ya que
a raíz de cierta rivalidad por la competencia en las ventas tuvo
amenazas de otros vendedores, lo cual nos hace pensar en una venganza.
Ayer fue publicada aquí mismo una carta con todos
estos datos. Le agradeceré, señor delegado, me apoye con
los recursos que estén a su alcance. Para proporcionar información,
los lectores de La Jornada pueden comunicarse al tel: 044 2171-5539.
Rosalía Valencia Ojeda
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