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MARTES Ť 11
Ť
DICIEMBRE Ť
2001
ASTILLERO
Ť Julio Hernández López
LA MUY EXTENDIDA COMUNIDAD de los Hernández
(que somos, con mucho, los del apellido mayoritario del país) participamos
a usted que ha caído -en el cumplimiento de su deber- un usuario
por partida doble de esta masiva franquicia heráldica, el compañero
Jaime, quien se desempeñaba como agente del Ministerio Público
Federal y ha sido separado de manera tardíamente "inmediata" de
su cargo por andar citando a comparecer ante las autoridades a 27 desaparecidos
políticos.
HERNANDEZ HERNANDEZ SE apellida, pues, el fiscal
al que la magia de mejor nomenclatura -Macedo de la Concha, por ejemplo-convirtió
en la rompible parte más delgada del hilo burocrático de
la PGR. Se le ha puesto fuera de la nómina federal debido al "error"
-que no "burla", según explicó el citado general procurador
de la República- cometido en uno de los primeros pasos procesales
que pretendían demostrar que el ánimo justiciero del gobierno
federal es genuino y no meramente discursivo, mediático, como reconoce
el Presidente que fue su primer año de gobierno (quien, por cierto,
ayer tuvo larga reunión en Los Pinos con su gabinete de seguridad
nacional).
AQUELLA PIFIA MONUMENTAL de llamar mediante oficio
a quienes durante décadas han sido denunciados como secuestrados
por el Estado, fue dada a conocer por La Jornada, en una nota bajo
la firma de Blanche Petrich, y sirvió de manera tajante para corroborar
lo que todo mundo sabía pero temía confirmar: el gobierno
federal no sabe ni tiene gran interés en saber gran cosa de desaparecidos,
torturados y secuestrados por razones políticas. Tan no sabe nada,
ni quiere saber, que lo mismo cita a comparecer a desaparecidos que desaparece
a comparecidos. Por ello, el mismísimo secretario de Gobernación,
Santiago Creel, hubo de patinar cuando le preguntaron sobre la nota jornalera:
"son asuntos técnicos", dijo sobre los citatorios infames.
MUCHO DEBEN HABERSE devanado el seso los genios
de la estrategia foxista a la hora de colocar el pulgar hacia abajo frente
al expediente laboral del citado Hernández Hernández: la
técnica del chivo expiatorio no admite divagaciones partidistas,
ahora y siempre han de salvarse las piezas mayores del ajedrez a cambio
del sacrificio de peones.
Sigue sufriendo, mientras tanto, el general procurador
de la República por no encontrar quién le acepte la amable
invitación a ser el fiscal especial que, a nombre del licenciado
Macedo de la Concha, indague tropelías e injusticias del pasado,
algunas de ellas cometidas o toleradas por el general Macedo de la Concha.
¡Carajo, no hay valor cívico en los mexicanos! Nadie acepta
la honrosa encomienda, para la cual el titular de la PGR ofrece las más
amplias garantías de respeto y autonomía.
TODO LO CONTRARIO SUCEDE, sin embargo, con quienes
ya tienen nombramiento en el gabinete foxista y no quieren dejarlo. El
mismísimo candidato a presidente interino, Diego Fernández
de Cevallos, dijo ayer que hacen falta cambios en el equipo de trabajo
del presidente de la República al que un día antes había
levantado la mano, al estilo deportivo, en la asamblea nacional priísta,
perdón, panista, realizada en Querétaro. ¿Cuántos
deberían dejar el gabinete?, se le preguntó al diamantino
político, y éste, con elegancia matemática, respondió:
"Bastantitos". Luego aclaró que hablaba de delegados.
LOS PRIMEROS EN ANDAR EN la cuerda floja del reacomodo
laboral son los tales coordinadores que, según el sueño administrativo
foxístico, habrían de tener bajo su dominio a los secretarios
de las ramas afines y acordar directamente con el Presidente las tareas
a realizar. Sarukhán, Aguilar Zinser, Sojo son algunos de los ilustres
apellidos en vías de reubicación a la baja. También
los jefes de oficinas especiales de la Presidencia, como Xóchitl
Gálvez, que iría al Instituto Nacional Indigenista.
MENOS PADECERES PASA, EN cambio, el jefe de gobierno
Capitalino, Andrés Manuel López Obrador, a la hora de hacer
nombramientos. Buenos o malos, cuando menos le ayudan a que no se creen
vacíos políticos. En el caso del asesinato de la abogada
Digna Ochoa, por ejemplo, ha nombrado al subprocurador Renato Sales Heredia
como fiscal especial. La designación trata de recuperar una confianza
que se ha ido erosionando en los planos nacional e internacional, donde
se esperaba que la administración perredista capitalina tuviese
mayores y mejores resultados en sus pesquisas y no los precarios avances
que, de haberse registrado en gobiernos priístas o panistas, ya
se estarían adjudicando a colusiones de intereses y predominios
de mafias y fueros (signos de los tiempos: los militares convocados a declarar
ante la Procuraduría capitalina no lo han hecho y, de tanto cohabitar,
al lopezobradorismo se le comienzan a pegar conductas del foxismo: la Procuraduría
de Bernardo Bátiz habría citado a declarar, en el caso Ochoa,
a una hija del general José Francisco Gallardo, por las sospechas
que habría causado que ésta invitara a la abogada a su fiesta
de cumpleaños número... ocho. Mickey Mouse y Harry Potter
perdonen a los sabuesos batísticos, que no batisabuesos.)
OTRO PEJENOMBRAMIENTO FUE el
del ingeniero David Serur como responsable de la construcción del
segundo piso del Periférico y el Viaducto. En medio de la sospecha
de que el anuncio de la magna obra fue una ocurrencia soltada ante micrófonos
a los que quería agradar para atenuar críticas, el tabasqueño
ha ido caminando hacia delante como si el proyecto hubiese sido madurado
con cuidado, y no un acelere del que César Buenrrostro, el secretario
de Obras Públicas, se enteró precisamente escuchando la radio.
Al nombrar a Serur, Andrés Manuel le da densidad a su fantasía
de asfalto y, aún mejor, hace buena alianza con la comunidad judía
a la que pertenece de manera destacada el citado ingeniero civil, y con
el alemanismo a cuyo entorno pertenece.
NO QUIERE ESTA CONDOLIDA sección hernandística
cerrar la entrega de hoy quedándose con los malos pensamientos derivados
de los vaticinios económicos del gobierno federal para el año
venidero, que consideran el precio del barril de petróleo en 15.50
dólares, ni con el estallido de un coche en Puebla que se pensó
acto de terror con bomba y acabó siendo un petardo de pleito de
colonia, ni con la insistencia de Amnistía Internacional de que
en México se incumplen las promesas de defensa de los derechos humanos,
ni con la noticia de que, ahora que sí les interesa controlar la
frontera, los gringos han desmantelado la red de tráfico de indocumentados
más grande detectada hasta ahora, con complicidades internas como
la de la firma de autobuses Golden State Transportation.
NO, NADA DE ESO. A cambio cerremos, hermanos, la
sesión espiritual de hoy con este bello pensamiento:
"En la carrera por la vida, si de equidad e igualdad se
trata, lo justo es arrancar todos de la misma línea de salida".
Es de Marta de Fox, al empezar el discurso de poesía en prosa con
que instaló en Villahermosa (en compañía de las autoridades
actuales y de la esposa de Manuel Andrade, por supuesto) el comité
estatal de Arráncame la Vida, perdón, Arranque parejo
en la vida, un programa más del proyecto transexenal conyugal.
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