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MARTES Ť 11
Ť DICIEMBRE Ť
2001
Ť No operarán en relación con sucesos
anteriores, como la guerra sucia, Acteal o Aguas Blancas
Aprueba el Senado convenciones internacionales para
castigar violaciones a derechos humanos
Ť Es una clara muestra de las resistencias a la revisión
del pasado: legisladores del PRD
ANDREA BECERRIL
En una clara muestra de las ''resistencias a la revisión
del pasado'', como señaló en tribuna el perredista Rutilio
Escandón, el Senado de la República aprobó cinco instrumentos
internacionales, entre ellos la Convención para la Imprescriptibilidad
de los Crímenes de Guerra y de Lesa Humanidad, y la Convención
Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, pero sin
que operen en relación con sucesos anteriores, como la guerra
sucia de los setenta y dejando a salvo a integrantes de las fuerzas
armadas, bajo el argumento de que la Constitución ''reconoce el
fuero de guerra, cuando el militar haya cometido algún ilícito
encontrándose en servicio''.
El
PRD, a través los senadores Rutilio Escandón y Ricardo Gerardo
Higuera, advirtió que no hay un compromiso real del gobierno federal
en materia de respeto y protección de los derechos humanos, y la
ratificación, con reservas, de esos instrumentos internacionales
en la materia, es parte del discurso y la retórica de Vicente Fox.
Pese a sus objeciones, la fracción perredista aprobó
conjuntamente con priístas y panistas los cinco convenios, que datan
-algunos de ellos- de 30 años atrás.
El PRD advirtió, a través de Higuera, que
el hecho de que la imprescriptibilidad sólo opere a raíz
de su entrada en vigor, ''no exime al gobierno del presidente Fox de esclarecer
las desapariciones de ciudadanos mexicanos llevadas a cabo durante las
décadas de los sesenta, setenta, ochenta y noventa, y más
recientemente la muerte de la abogada Digna Ochoa''.
Los senadores del PRI y del PAN avalaron la aprobación
de las dos convenciones, lo que incluso consideraron un logro. Por lo que
se refiere a la Convención sobre la Imprescriptibilidad de los Crímenes
de Guerra y de Lesa Humanidad, el Senado aprobó la ''declaración
interpretativa, que el gobierno foxista propuso a ese instrumento adoptado
por la ONU el 26 de noviembre de 1968, para que ''se entienda'' que únicamente
considerará no prescriptibles las desapariciones forzadas de personas
y otros delitos -como el genocidio, contemplado en ese convenio- "cometidos
con posterioridad a su entrada en vigor para México''.
Ello significa que no serán imprescriptibles los
delitos referidos a la masacre estudiantil del 2 de octubre, las matanzas
de Aguas Blancas, de Acteal, y tal actitud ''contrasta con la retórica
gubernamental'', advirtió el perredista Rutilio Escandón.
En contraparte el PAN, a través del senador Víctor
Manuel Torres, lo avaló: ''Celebramos la declaración interpretativa
que el Estado mexicano le añade a la firma de este instrumento'',
toda vez que se basa en ''el principio de la no retroactividad de las leyes,
consagrado en el artículo 14 de la Constitución''. El panista
consideró que ello ''es un ejemplo claro del espíritu conciliador
y del sentido de justicia del Ejecutivo mexicano''.
Otro instrumento internacional ayer ratificado fue la
Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas,
por el que el gobierno mexicano ''se suma a la tendencia de la sociedad
internacional'' de fortalecer la protección a los derechos humanos,
preservar la libertad física de los ciudadanos evitando detenciones
ilegales, ocultamiento y prisiones arbitrarias, pero dejó fuera
un elemento central, al reservarse el artículo IX.
En el mismo, esa Convención, adoptada por la ONU
en 1994, precisa que ''los presuntos responsables de los hechos constitutivos
del delito de desaparición forzada de personas sólo podrán
ser juzgados por las jurisdicciones de derecho común competentes
en cada Estado, con excepción de toda jurisdicción especial,
en particular la militar''.
Ese artículo IX establece que ''los hechos constitutivos
de desaparición forzada no podrán considerarse como cometidos
en el ejercicio de las funciones militares. No se admitirán privilegios,
inmunidades ni dispensas especiales en tales procesos, sin perjuicio de
las disposiciones que figuran en la Convención de Viena sobre Relaciones
Diplomáticas''.
El Senado avaló la reserva de ese artículo
IX, y aceptó el argumento del gobierno foxista en el sentido de
que ''la Constitución Política reconoce el fuero de guerra,
cuando el militar haya cometido algún ilícito encontrándose
en servicio'', y que además ''el fuero de guerra no constituye jurisdicción
especial en el sentido de la Convención''.
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