Ť Incineran en Baja California 19 toneladas de narcóticos asegurados al narco

Condenan a cinco años de prisión a Martín Rangel León, de la banda del Chapo Guzmán

Ť También enfrenta otro proceso por delitos contra la salud por posesión de sicotrópicos

El juez primero de distrito de procesos pe-nales federales en el estado de México condenó a cinco años de prisión a Martín Rangel León, alias El Lince, miembro de la organización criminal de Joaquín Guzmán Loera, conocido como El Chapo Guzmán, informó la Procuraduría General de la Re-pública (PGR).

En un comunicado, la dependencia detalló que el ahora sentenciado enfrenta otro proceso por delitos contra la salud en su modalidad de posesión de sicotrópicos para su comercialización.

El impartidor de justicia también notificó a Rangel León la negativa a los beneficios de la sustitución de la pena privativa de libertad y la condena condicional, apuntó la institución.

Recordó que Rangel León fue detenido durante un cateo en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, donde la Policía Judicial Federal encontró 115 cápsulas de metilendioxi, me-tanfetaminas, sustancia en polvo del mismo material y semilla de mariguana.

La PGR detalló que la resolución contra Martín Rangel fue notificada a la Unidad Especializada en Delincuencia Organizada por el juez primero de distrito en materia de procesos penales federales, radicado en el estado de México.

Por otra parte, la PGR reportó ayer que a través de su delegación en Baja California se llevó a cabo la segunda incineración de 19 toneladas de diversos tipos de narcóticos asegurados en diferentes acciones contra el narcotráfico realizadas por la Agencia Fe-deral de Investigaciones, en coordinación con diversas corporaciones policiacas y el Ejército Mexicano.

La primera destrucción se llevó a cabo en el campo de tiro del 23 regimiento de caballería motorizada, lugar a donde asistieron autoridades de los tres órdenes de gobierno y del Ejército Mexicano, así como personal de auditoría de control y evaluación de la contraloría interna de la Procuraduría Ge-neral de la República, quienes verificaron peso y autenticidad de la droga.

El segundo acto de destrucción de enervantes se realizó en las instalaciones de la guarnición militar de San Felipe, Baja California, donde también asistieron autoridades gubernamentales.