Ť Angélica María, entre los artistas que reunieron a más de 3 mil 500 personas

Baile de nostalgia rocanrolera, romántica y tropical hace olvidar rencillas a dos pueblos de Guanajuato

ARTURO CRUZ BARCENAS ENVIADO

Uriangato, gto., Con un baile de gala, en el Campo de Beisbol de esta población, más de tres mil 500 personas bailaron y cantaron con la presentación de Angélica María, Alberto Vázquez, Johnny Laboriel, Los Yonic's, Los Santaneros, Los Socios del Ritmo y el conjunto local Cálidos Show, en un programa que comenzó a las 21 horas del pasado sábado y concluyó a las 4 de la mañana del domingo 16 de diciembre.

Gran número de trocas hacían más difícil el tránsito por las estrechas calles aledañas al sitio del baile. Muchas son de los aproximadamente 10 mil paisanos migrantes que llegan desde Estados Unidos cada fin de año a visitar a sus familias. "Hay dinero; se siente que hay money", dicen algunos lugareños, muchos de Moroleón, localidad vecina a Uriangato, separadas por la calle 12 de Octubre y por rencillas económicas -otras que dan risa, pues tienen que ver con que se lleven las mujeres de un lado y otro- entre sus pobladores.

Al baile llegaron unas 3 mil 500 personas, algo así como la mitad de la capacidad del campo beisbolero. La mesa para cuatro costó 800 pesos en preventa y mil el mero día. Parecía fiesta de 15 años. Flores blancas y rojas adornaban los centros en coquetos floreros y manteles blancos. Las mujeres lucieron vestidos largos, tocados y en las mejillas las embellecía el rubor. Los hombres iban de traje, sin desmerecer.

No podía ser menos, pues las dos poblaciones son famosas por su industria textil, del vestido y la fayuca. "Para vestir a usted", es un lema que se ve en varios expendios. Algunos asistentes piden su brandy Torres, de a 450 pesos la botella; el tequila Don Julio a 600, y el coñac Martell a 900. Al tocar Los Santaneros (de Andrés Terrones y Ramiro Alvarez, del grupo original), el primero aclara a sus fans que ahora hay varias sonoras Santanera, por diferencias entre ellos. "Pepe Bustos quería hacer cosas que no estaban bien. Quiso apoderarse de todo. Nos robó mucho dinero. Es una lástima, pues está usurpando el nombre".

Algunas de las dolorosas

Aun así, ofrecieron algunas de las dolorosas de la tradicional sonora, como Perfume de gardenias. Siguieron Los Yonic's, de José Manuel Zamacona, con 25 años de trayectoria, que hicieron que gran parte del respetable se dirigiera al escenario norte. Fueron cuatro los tinglados. El romanticismo inundó el home y hasta la zona de home run, con rolas como Soy yo y otras de su disco Viajero del amor, con clásicas italianas.

Al borde de las lágrimas -es híper fan de Yonic's-, emocionado, Pablo González, de Moroleón, dijo que los de Uriangato no saben apreciar un baile. "Moroleón tiene más dinero porque somos más industriales. Nuestras mujeres ganan el doble que las de aquí y muchas perciben más que el hombre."

El organizador es de Moroleón

-ƑPor qué la antipatía?

-Porque nosotros tuvimos la primera reacción para ser industriales.

-Pero si son la misma gente...

-Sí, se ve la misma raza, pero la gente con puestos y cortinas es de Moroleón. Aquí se vende, pero el dinero se va para Moroleón, con nosotros. Es más, el organizador de este baile es de Moroleón. Todos lo sabemos. En mi lado hay un local... no, un salón especial para estos bailes. Allá está cubierto de todo a todo, no con mantas, como aquí. Este es el primer baile de gala en toda la historia de Uriangato. En enero las fiestas... šuh!, cuídese. Allá pagamos 2 mil varos por mesa, no mil, que es lo que cuesta aquí.

Cuando subió Laboriel eso fue un relajo. Al grito de "yo fui el primero en...", enloqueció a la gente. "Hace 40 años canté la de Vaselina", "hace 40 años, antes de Alejandra Guzmán, interpreté Aviéntense todos." Subió Angélica María y la nostalgia cundió entre ese público maduro. Pero Alberto Vázquez, cigarro en mano, la hizo chillar; se la rifó.

Finalizó el bailongo el grupo Los Socios del Ritmo, quienes revivieron con la cumbia Llorar, llorar. Muchos los creían pasados y hasta desaparecidos. Sólo se les recordaba por el tema Vamos a platicar, de la época de oro lacrimógena.

El empresario Rubén Guzmán Pérez prometió organizar más eventos de este tamaño. "Vamos por el rescate del comercio de Moroleón, Yuriria y Uriangato. Aquí es la zona más importante de la industria del vestido, en el sur de Guanajuato. Los negocios no entienden de las diferencias entre Uriangato y Moroleón. Nosotros vemos las cosas como acciones de servicio".

Business is business, pues.