Ť Llama a los pobres a conducirse con justicia y paz

Lamenta Rivera la violencia ciega de terrorismo y guerra

Ť El cardenal pide evitar la "discusión sobre ideologías"

KARINA AVILES

El arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, manifestó su preocupación por la "violencia ciega" del terrorismo y de las guerras que han seguido a los atentados del 11 de septiembre, pues son acontecimientos "dolorosos que han roto la armonía entre las naciones".

En un mensaje de Navidad firmado también por ocho obispos auxiliares, el rector de la Basílica de Guadalupe, Diego Monroy y dos monseñores más, el cardenal añadió: "Al mismo tiempo, vivimos con toda nuestra nación las dificultades propias de un crecimiento social y político con las inevitables discrepancias y las legítimas diferencias."

Durante la tradicional misa del gallo en la Catedral Metropolitana, Rivera Carrera expresó que si bien la ciudad de México es una capital de contrastes, sobre todo es una ciudad de fe "que vibra también en torno al nacimiento del Salvador".

El cardenal pidió a las familias encontrar motivos de alegría y unidad. Llamó a los jóvenes a levantar la mirada más allá de las dificultades presentes y a empeñarse en ser motivo de esperanza en un mundo mejor.

A los pobres los convocó a buscar la superación por caminos de justicia y paz: "La buena noticia del nacimiento de Jesús se dirige en primer lugar a los más sencillos, para compartir con ellos la esperanza de la salvación verdadera y ser también los primeros en anunciarla."

Al dirigirse a "los alejados del influjo directo del Evangelio", Rivera Carrera pidió que "su buena voluntad para actuar, conforme a la verdad y la justicia, se ilumine plenamente con la cercanía de Cristo y se dejen atraer y amar por él". Y agregó: "No basta con ideas personales que fácilmente pueden llevarnos a un relativismo desgastante, es más reconfortante la realidad de los acontecimientos que la discusión sobre ideologías."

El cardenal destacó: "No podemos dejar de contemplar con preocupación los acontecimientos dolorosos que han roto la armonía entre las naciones: la violencia ciega, ya sea la del terrorismo o la de las guerras que le siguen, lo cual contrasta con los caminos de Dios, que nos ofrecen un signo de amor y reconciliación en la vida nueva y resplandecen como una luz intensa de paz en medio de la oscuridad de la noche."

Rivera llamó a renovar la esperanza fundada en Cristo y a ir hacia él más allá de adornos y expresiones de festejos tradicionales. "Pongamos en él las bases firmes para superar la inseguridad, la falta de empleo, la escasez de recursos, los problemas ambientales y en nuestros hogares, los conflictos y la violencia", apuntó.

Por último, el cardenal añadió que es el momento de renovar la fe, superando el desaliento y el pesimismo. "Creamos en el plan de Dios, creamos en la historia de salvación del hombre, creamos en la posibilidad de seguir construyendo un mundo de fe y de esperanza", pidió.

El mensaje fue firmado por los monseñores Guillermo Ortiz, Felipe Tejeda, Francisco Clavel, Marcelino Hernández, Guillermo Moreno, Enrique Glennie, Jesús Martínez, Luis Fletes, Jonás Guerrero, Rogelio Esquivel, Diego Monroy, Alberto Márquez y el arzobispo Rivera.