José Steinsleger

Argentina dejó de llorar

Primera llamada, primera. Devenido con los años en Partido Justicialista (PJ) sin más, la designación del nuevo presidente argentino demostró que el peronismo guarda una muñeca política sin parangón en América Latina. Porque en la temible "interna" del PJ para suceder al defenestrado Fernando de la Rúa en la Casa Rosada (de gobierno), El Adolfo (así le dicen a Rodríguez Saá en su provincia de San Luis) resultó el menos horripilante de sus dirigentes políticos.

Hace muchos años, un estudiante de la UNAM le preguntó a un argentino querido en México: "ƑCómo es posible que usted sea peronista?" El profesor Rodolfo Puiggrós respondió: "No soy peronista. Soy peronólogo." El joven insistió: "ƑY qué es el peronismo?" Atusándose el mostacho, Puiggrós sentenció: "lo mejor y lo peor que ha tenido la Argentina".

Sería abusivo que el periodista recurra a los términos "científicos" que desde hace 55 años han tratado de llegar al corazón de la alcachofa peronista. Pero mire usted: si ampliamos el diafragma también el PRI fue lo peor y lo mejor que tuvo México. ƑO Carlos Salinas de Gortari no fue el revés de Lázaro Cárdenas, así como Carlos Menem lo fue de Juan Domingo Perón?

Claro, siempre será enriquecedor que esos partidos políticos que se identificaron con el nacionalismo popular sean escudriñados con el rigor y serenidad del olimpo académico. Pero los dinosaurios siguen estando ahí. No nos asustemos: el PRI y el PJ ya son algo distinto de lo que fueron o quisieron ser.

El problema es que, a diferencia de los dinosaurios, existen. ƑPor qué? La politología motherna ya debería haber respondido a una pregunta que, bien formulada, requiere de conocimientos básicos del contexto histórico y social en que actúan estos partidos. Mas como la historia, la filosofía y la cultura son disciplinas que la politología motherna ya dio de baja, ahí nos vemos.

Y es que los mothernos creen que la comprensión de las realidades políticas de América Latina dependen del uso y desuso de palabras y conceptos: populismo, caudillismo, autoritarismo. Mientras que los dinosaurios no mueven el dedo del renglón: patria, soberanía, nación.

A los mothernos tampoco les importan los muertos que causan el FMI y el modelo neoliberal. Les preocupa que Hugo Chávez, presidente de Venezuela, utilice expresiones como "esfíngula invocación" o "frase preludial"... En tanto, los pueblos buscan su camino: "con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes", como en alguna ocasión dijo Perón y tal como sucedió la semana pasada en Buenos Aires y varias ciudades argentinas.

Crisis continental

Segunda llamada, segunda. Prescindamos, por un instante, de quién dijo qué para retomar las imágenes que nos mostraron una nueva generación de argentinos que en las calles predicó el antiguo proverbio turco que dice: "la piedra que arroja el pueblo llega lejos".

ƑQué genio de la politología motherna podrá decirnos, de ahora en más, qué sigue en el país de Maradona, Evita y Sigmund Freud? Los gobernantes latinoamericanos que en la pasada reunión cumbre de Lima le dieron su respaldo a De la Rúa, el presidente autista, y Felipe González, ineluctable andaluz que se especializa en pescar en ríos revueltos, manifestaron su apoyo a las "instituciones" y el sistema "democrático" argentino. ƑPensaban ya en los gángsters del PJ que por vía "constitucional" volvieron al poder?

Por su lado, y sin convencer a nadie, los ministros de Economía del continente aseguraron, óigalo bien, que la crisis argentina no tendrá repercusiones serias en sus naciones. O sea que quienes a diario nos dicen que el mundo está "globalizado" nos dicen ahora que la suspensión de pagos de la deuda argentina, la posible devaluación y la dolarización en curso, nos afecta "marginalmente". ƑEn qué quedamos?

Las inversiones de España en Argentina totalizan 40 mil millones de dólares, que equivalen a 5 por ciento de su producto bruto interno. 25 por ciento de las inversiones chilenas radican en el país del Plata. La economía uruguaya depende del turismo en masa de los argentinos. La de Bolivia, Perú, Paraguay y Brasil (que en 1998 devaluó su moneda y le asestó un duro golpe al Mercosur y la paridad cambiaria argentina) corren peligro de irse a pique.

Lejos de haber cometido "errores" o actos de "corrupción" (que para la canalla tecnocrática monitoreada por el FMI son como el oxígeno al pulmón), la política económica de Menem respondió a la continuación de un calculado proceso de destrucción nacional.

La primera fase de este proceso empezó en 1955, cuando la oligarquía vacuna quitó a Perón del tablero. Lúcido representante de la burguesía industrial nacionalista, Perón sabía que en el contexto tercermundista y latinoamericano, la "Argentina potencia" en que soñaba necesitaba de alianzas sólidas con el movimiento obrero organizado.

El primer freno a la pretensión industrialista de Argentina lo puso el FMI en los años de la dictadura militar 1966-1973. Más tarde, cuando la llamada Comisión Trilateral (Estados Unidos, Alemania Federal y Japón) empezó a diseñar la "nueva división internacional del trabajo", los acuerdos Viola-Figueiredo acordaron el Pacto del Cono Sur (1980), suscrito por las dictaduras militares de Argentina y Brasil.

A Brasil, donde el movimiento obrero era menos poderoso que el argentino, le asignó el rol industrialista y a la Argentina le asignó el de "granero del mundo", como en las primeras décadas del siglo. Sin embargo, para llevar este proceso a puerto seguro, la "patria financiera" debía asesinar, desaparecer, torturar, encarcelar y desterrar a varias generaciones de argentinos (1976-83).

Tarea cumplida

Ƒ"Terroristas", como se dice ahora? En la distribución de "desaparecidos" por profesión u ocupación, 30.2 por ciento fueron obreros, 21 estudiantes, 17.9 empleados, 10.7 profesionales, 5.7 docentes (Informe Nunca Más, Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas, Conadep, 1984).

En 1983 el radicalismo se alzó con la victoria. Miles de votos del electorado peronista, asqueado de sus líderes, le dieron a Raúl Alfonsín una oportunidad histórica, que ni Perón conoció en vida. Pero Alfonsín representaba la expresión más simplona de las clases medias argentinas, radicales o peronistas: ni con unos ni con otros, sino todo lo contrario.

ƑDemocracia con dependencia del FMI? Que viva la democracia. En 1989, los grupos económicos lo echaron a patadas, seis meses antes de concluir su mandato.

Entre los disparates que se han escrito acerca de la crisis de días pasados escojo una de Ripley: "Con frecuencia se escucha, inverosímilmente, que la crisis argentina es el resultado de la aplicación de 'políticas neoliberales'. Es una afirmación prácticamente absurda (sic)... Argentina es el país en América Latina que menos abrió sus fronteras al proceso de globalización (sic)... el que menos se arriesgó a enfrentar los dilemas de la apertura (sic)... el menemismo aseguró la continuación de una gestión eminentemente autárquica (sic)..."

A más de irresponsables y desinformadas, ligerezas de esa índole sólo se pueden escribir con dos botellas de tequila encima. Pues al 12 y 15 por ciento de su valor nominal, con la venia del FMI, las bandas tecnocráticas del menemismo vendieron Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), Ferrocarriles Argentinos, Gas del Estado, Vialidad Nacional, Aerolíneas Argentinas, Líneas Marítimas del Estado, Obras Sanitarias, la Empresa Nacional de Telecomunicaciones y el Sistema Eléctrico del Gran Buenos Aires.

ƑCuál "autarquía"? En ocho años de frenesí privatizador, el poder económico trasnacional compró a precio de remate 426 empresas argentinas en 29 mil 116 millones de dólares, valor equivalente a un solo año de exportaciones anuales. Inclusive la extensión de pasaportes y cédulas de identidad, que obligatoriamente deben tramitarse en la Policía Federal, donde funciona una oficina del FBI, son extendidos por una empresa privada.

Menem fue el discípulo más aplicado de la "globalización". Llegó temprano a clases, cumplió con las tareas encomendadas, tragó la sopa de números del FMI y encabezó el desmantelamiento industrial más importante de América Latina. Guido Di Tella, su canciller, se jactaba de sostener "relaciones carnales" con Estados Unidos, a extremos de convertirse en su "muñeca inflable", como dijo Ricardo Molinas, ex fiscal de la nación. Y en 1991, Argentina fue el único país latinoamericano en enviar un par de veleros a la Guerra del Golfo.

En el Club Argentino de Londres, Di Tella declaró que "Argentina no se juntaría más con 'gente horrible' (léase no blancos)..." "Durante mucho tiempo -agregó- bajo el reino de ideologías peregrinas abjuramos de toda posible asociación con los países ricos y poderosos y nos inclinamos por un tercermundismo libresco que en modo alguno convenía a los intereses de la Argentina, ni a su realidad de país de cierto desarrollo y de tradición cultural occidental" (11 de junio de 1995).

Estación terminal

Tercera llamada, tercera. El 19 de diciembre pasado, en Plaza de Mayo, los hijos sin futuro de la modernización excluyente corearon: "šOsama!/ šBin Laden!/ štiráte en un avión!/ šy que en Casa Rosada/ no quede un ladrón!" ƑExcesos verbales de un pueblo que en el país de los alimentos fue condenado por "los que saben" a la lucha de pobres vs. pobres, a las ollas populares y el saqueo generalizado?

Y mientras la ira popular aumentaba, el hijo de De la Rúa (que gastaba 7 mil 500 dólares mensuales de caja chica para seducir y pasear con Shakira, su novia y cantante colombiana) escribía el imbecilísimo discurso con el que su padre quiso justificar el estado de sitio. En tanto Cecilia Bolocco de Menem declaraba a la revista española šHola! que a su esposo le tenía preparado "un árbol de Navidad, angelitos y flores en mi casa, un gesto femenino".

En 1989, en plena hiperinflación y asaltos a los supermercados, Argentina tenía 6 por ciento de desempleo y una deuda de 65 mil millones de dólares (mmd). Carlos Menem asumió el poder y propuso la "revolución productiva". Vendió todo. Hoy, con 20 por ciento de desocupación y 132 mmd de deuda, el presidente Rodríguez Saá ha dicho que con la suspensión de pagos se crearán empleos.

ƑCumplirá? Ya no hay más llamadas. Al FMI, al proyecto de anexión a Estados Unidos por vía del ALCA, a los tecnócratas insensibles, a los intelectuales oportunistas y a los políticos corruptos del neoliberalismo, el pueblo argentino dictó sentencia: no va más. Hasta aquí llegaron.