Ť Críticas en Italia

Advierte Berlusconi que defenderá su puesto de canciller

DPA, AFP Y REUTERS

Roma, 8 de enero. El primer ministro y titular de la cartera del Exterior italiano en funciones, Silvio Berlusconi, anunció que defenderá ante el Parlamento su doble función ante crecientes críticas para que designe de inmediato a un nuevo canciller, y al respecto se barajaban varios nombres, entre ellos el de Gianfranco Fini.

Berlusconi hizo saber que se dirigirá al Parlamento el próximo lunes para enfrentar a quienes cuestionan que desarrolle ambos cargos, y aseveró que la política italiana exterior seguirá siendo "netamente europea" y ofreció garantías de que no habrá cambios en la materia.

Sin embargo, las críticas han ido creciendo desde que el domingo dimitió su canciller, Ranato Ruggiero, con quien tuvo fuerte discusión con relación al euro y las directrices de la política exterior. Pues, tanto en Italia como en otros países europeos prevalece el temor de que el gobierno italiano cada vez se nota más influenciado por los "euroescépticos".

Si bien de todos modos se han mencionado varios nombres para ocupar la cancillería, ha llamado la atención el nombre del jefe del ultraderechista partido Alianza Nacional y uno de los políticos más controvertidos del país, Gianfranco Fini, quien actualmente es viceprimer ministro.

El partido de Fini tiene sus raíces en el pasado fascista del dictador Benito Musolini, por lo que su designación podría aumentar las tensiones entre los aliados de la Unión Europea, alarmados ya por la partida de Ruggiero justo en relación con un conflicto en torno a Europa.

Otros nombres que aparecen son los del ministro de Cultura, Guiliano Urbani; el del Servicio Civil, Franco Frattini, y el ex canciller Gianni de Michelis. Pero Fini es la figura política de más alto rango entre todos los candidatos.

Las críticas contra Berlusconi por ocupar dos cargos, que ya de entrada ha dificultado la agenda para encuentros con otros cancilleres europeos, van tanto de sus allegados como de socios de la coalición, del presidente de la república Carlo Azeglio Ciampi, y hasta de la oposición de izquierda, al estimarse que no es posible "acumular dos cargos" en un país como Italia.