Ť Martín Rábago llama a la IP a ser solidaria con los pobres

Delicada situación en México, ante el malestar por la reforma fiscal: obispo

Ť Anuncia declaración oficial de la CEM sobre el tema, en breve

JOSE ANTONIO ROMAN

En "legítima" la inconformidad por las nuevas disposiciones fiscales; la iniciativa privada está llamada a actuar con solidaridad con quienes menos tienen y contribuir al desarrollo del país, dijo el vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), José Guadalupe Martín Rábago, quien calificó de "especialmente delicado" el momento que vive el país, debido a la sensación de que la reforma fiscal no fue la adecuada.

En conferencia de prensa en uno de los recesos de la primera reunión anual que tuvo ayer el Consejo Permanente del Episcopado, el también obispo de la diócesis de León consideró que la inconformidad expresada por los empresarios se debe en gran parte a que las obligaciones hacendarias recaen esencialmente en los mismos sectores y no se amplió la base de contribuyentes.

Acompañado en la conferencia por el obispo de Toluca, Francisco Robles Ortega, el vicepresidente de la CEM anunció que en breve el Consejo de Presidencia emitirá, en representación de todos los obispos católicos del país, un pronunciamiento oficial en torno al tema de la reforma. "Creemos que es conveniente que haya criterios de sensatez en este momento difícil, y los obispos podemos ayudar con eso; sabemos que no somos el único interlocutor en la sociedad, pero también tenemos una palabra que decir".

En forma personal consideró que el país vive un momento "especialmente delicado", debido a que en muchos sectores sociales priva la sensación de malestar y la convicción de que esta reforma fiscal no fue la adecuada.

Por su parte, Robles Ortega, en su calidad de representante suplente de la región pastoral Metropolitana Circundante del Consejo Permanente, señaló que aun antes de invitar a la población a tributar, los poderes Ejecutivo y Legislativo deben encontrar los mecanismos necesarios y eficaces para lograr que los evasores cumplan con el pago de los impuestos, pues "a veces lo más fácil es imponer más cargas hacendarias, pero queda todavía resolver el asunto de la evasión".

"No hay cultura de tributación"

En su intervención, el obispo Martín Rábago expresó una serie de reflexiones en torno a cuestiones hacendarias. En primer lugar, dijo, los mexicanos necesitamos una mayor cultura de la tributación; como sociedad no hemos vivido la experiencia de tributar de manera justa. El establecimiento de un sistema fiscal adecuado es necesario para establecer también una verdadera justicia social.

En segundo lugar, los recursos recaudados deben ser usados en forma transparente. "La desconfianza y la falta de cultura de tributación responde a las sospechas, y muchas veces a que los dineros recaudados no se aplican de manera adecuada y eso provoca que el pueblo dude en colaborar", dijo.

Como tercer punto, citó, existe la sensación de que las recientes disposiciones fiscales se elaboraron "con el tiempo encima", y, en consecuencia, con poca serenidad para poder tomar decisiones tan trascendentes para el país.

Los más de 20 obispos miembros del Consejo Permanente -los seis del Consejo de Presidencia y los representantes de las 15 regiones pastorales en que está dividido eclesiásticamente el territorio nacional- se reunieron todo el día de ayer en las oficinas de la secretaría general, con el propósito de avanzar en la organización de su próxima asamblea plenaria que se verificará del 8 al 12 de abril, en las instalaciones episcopales de Lago de Guadalupe, en el municipio mexiquense de Cuautitlán.

Durante esos cinco días los más de 100 obispos católicos de todo el país deliberarán sobre la libertad religiosa, a 10 años de las reformas constitucionales que dieron reconocimiento jurídico a las iglesias, y que fueron impulsadas por el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari.