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Ť EU podría ampliar la ayuda financiera y militar
Ofensiva de las FARC en diversos poblados, dice el ejército colombiano
AFP, DPA Y REUTERS
Santafe de Bogota, 15 de enero. La guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) lanzó una ofensiva en varios poblados con saldo de torres de electricidad destruidas y bloqueo de carreteras, además de que provocaron la fuga de unos 39 presos de la insurgencia en otro ataque en la ciudad central de Ibagué, aseguraron fuentes militares.
Los enfrentamientos ocurrieron en medio de llamados del enviado especial de la ONU, el estadunidense James Lemoyne, de evitar "acciones militares provocativas" debido a que el esquema de paz "aún es frágil", y en momentos en que el presidente Andrés Pastrana anunciaba la continuación del proceso de paz.
Las acciones armadas tuvieron lugar la noche del lunes al martes en un ataque en el municipio de Algeciras, departamento de Huila, donde fueron detonadas dos bombas frente a un puesto policiaco y donde murieron tres rebeldes. En cuanto a la fuga de la cárcel de Ibagué, Tolima, un guardia murió.
El enviado Lemoyne se trasladó a la zona de distensión -en el sur del país- para preparar el reinicio de las negociaciones este miércoles, al tiempo que el gobierno de Colombia negó que el endurecimiento con las FARC se haya debido a presiones estadunidenses. Más bien, afirmó, se debió a las actuaciones reacias de la insurgencia.
En todo caso, el gobierno de Estados Unidos estudia la posibilidad de extender su asistencia financiera y militar a Colombia, hasta ahora destinada a luchar contra el narcotráfico, para apoyar en adelante en forma abierta la guerra contras las guerrillas de las FARC y del Ejército de Liberación Nacional (ELN), dijo The Washington Post.
El vocero del Departamento de Estado, Philip Reeker, se negó a confirmar o desmentir el reporte del diario y se concretó a señalar que Washington se mantiene en permanente "revisión" de la ayuda a Colombia, acorde con sus objetivos políticos y sus opciones.
Este día continuaron las manifestaciones de satisfacción por la reanudación de las negociaciones de paz en Colombia, tanto por parte de la Unión Europea como por los países de la región como Venezuela, Ecuador, Perú, Bolivia y Chile.