Ť Se dejarán de publicar 2 millones de ejemplares, afirma Patricia van Rhijn
Advierte Caniem sobre caída de 20% en la producción de libros por reformas al ISR
Ť Riesgo de que desaparezcan 300 pequeñas editoriales, alerta
Ť Macotela propone gravar libros de lujo que no sean indispensables
ANASELLA ACOSTA NIETO
La producción de libros caerá 20 por ciento este año debido a las nuevas disposiciones fiscales que eliminan la exención de 50 por ciento del impuesto sobre la renta, que funcionó como estímulo a la industria editorial hasta diciembre pasado, dijo la vicepresidenta de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (Caniem), Patricia van Rhijn.
Durante el anuncio de la 23 versión de la Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería, Van Rhijn alertó sobre el cada vez más probable encarecimiento del libro, debido a la repercusión que el actual régimen fiscal tendrá en la industria.
Precisó que la Caniem continúa en contacto con las comisiones de cultura de las cámaras de Diputados y Senadores y con las diversas asociaciones autorales, a fin de revertir la ley que se calcula reduzca la producción editorial en casi 2 millones de ejemplares.
''Los editorialistas hemos acordado trabajar con diferentes grupos para revertir la legislación fiscal que grava la producción de libros. Ahora estamos en espera de una entrevista que solicitamos con el subsecretario de Ingresos de Hacienda, Rubén Aguirre", expresó Van Rhijn.
La industria editorial hará lo posible por regresar al régimen de exención -reiteró-, pues ''hay una gran preocupación por parte de las pequeñas editoriales, quienes deberán solventar la eliminación de la exención fiscal, los gastos en los departamentos contables y, al parecer, parte del ISR que ahora grava a los autores, quienes no van a querer asumirlo todo''.
Según datos de la cámara, la producción de libros en 2000 -último dato disponible- fue de 97 millones 773 mil 290 ejemplares, de los cuales se espera una reducción de 20 por ciento.
El cálculo de la disminución por concepto de repercusión fiscal se suma a la baja que se ha registrado en los últimos tres años. Mientras en 1998 la impresión de textos llegaba a 122 millones 102 mil 498 unidades; en 1999 fue de 115 millones 426 mil 429.
Patricia van Rhijn explicó que la industria editorial ha descartado el amparo judicial por el costo que implicaría a las pequeñas empresas, finalmente las más afectadas.
La Caniem calcula que de las 400 editoriales que se cuentan en su registro, 300 estarían en peligro de desaparecer por la nueva ley fiscal.
La vicepresidenta de la Caniem consideró que el gasto que deberán enfrentar las editoriales en este año es demasiado, por lo que evidentemente debe esperarse que el costo de los libros se incremente.
El director de la Feria Internacional del Libro, Fernando Macotela, dijo al respecto que el punto de vista de los fiscalistas que están obligados a obtener los fondos para que el país funcione es entendible, pero consideró que se pueden obtener más fondos y con mayor facilidad de otras fuentes.
Dijo que "tal vez algunos libros de lujo, los que no son estrictamente indispensables", podrían gravarse, pero no el resto, porque el poder adquisitivo de la gran mayoría de los mexicanos es bajo. Somos un pueblo con una gran cultura, pero con una educación deficiente, debido a la explosión demográfica, entre otros aspectos".