Erus estará en el escenario
El Carnaval brasileño, hoy en el Salón 21
ARTURO CRUZ BARCENAS
Hoy, la noche será larga o corta, en el Salón 21 de Andrómaco 17 y Molière, Polanco, en el Carnaval Brasileño 2002, que comenzará a eso de las 21 horas y, quizá, acabe a las cuatro de la mañana. Habrá comida, bebida, música brasileñas y hermosas mujeres, como la bella Vera de Forte. En el escenario estará el grupo Erus -traído por la embajada de Brasil en México- creador de una rola pícara y chévere: Camisinha (condón, en el argot de los brasileños).
Los integrantes de Erus están en DF desde el pasado jueves. México se les ha hecho maravilloso, pero dicen que saben que no todo es así, como en su país, donde las fabelas son reflejo del atraso y el olvido. Pero para no amargarse la vida, le dan a la samba como pocos. "En Brasil este ritmo sigue siendo de profunda raigambre popular. Ha evolucionado, como todo, pero gente como Caetano Veloso sigue siendo principal; es el jefe y tiene seguidores importantes, como Daniela Mercuri."
El grupo se formó en 1994
Admirador de Alexander Pirés y So pra Contrariar, así como de Roberto Carlos, Erus (de eros) se formó en 1994 en Uberlandia (estado de Sao Paulo) por los hermanos Gil y Demetrius Oliveira. Ha alternado con artistas de renombre nacional, como Gang do Samba, Shank, Mastruz com Leite, Araketu, Ivete Sangalo, Chiclete com Banana y Magníficos, que son parte de la geografía musical de un país rico en tradición sonora.
Allá, se han presentado en universidades, aniversarios de ciudades, espectáculos políticos y fiestas de fin de año. Sobre todo, en carnavales, como los de Acailandia, estado de Maranhao; Araguaina, estado de Tocantins; Redencao, estado de Pará; Minas Gerais y tantos otros.
Erus es ecléctico y sus shows son energéticos. Hacen bailar hasta a los tullidos. Quien asista hoy al Salón 21 bailará o disfrutará temas como Forrogode, mezcla contagiante de forró y pagode; Galera brasileira, educativa, pues habla de la necesidad de hacer sexo responsable.
Causan cierto halo febril con canciones Erus no sitio, Onde está vocé, Zero a zero, Cama de motel (ésta es la más dolorosa, pues Gil la hizo pensando en alguien que ya se fue), y otras, pero como será una fiesta de carnaval, interpretarán clásicas de su país.
Total, hoy, en el escenario estarán 16 músicos, bailarines y técnicos. Dicen que en sus casas se baila y se canta, inclusive en las situaciones difíciles. "Es una terapia barata y efectiva".