Acusan en Italia y España a dos empresas
relacionadas con Enron
Paris, Francia, 12 de febrero. Tras la espectacular
quiebra del grupo energético Enron y el escándalo suscitado
por el comportamiento de su auditor, Arthur Andersen, otras dos importantes
firmas del sector, Price Water House Coopers (PWC) y Deloitte and Touche
acaban de ser acusadas en Italia y España.
La autoridad de regulación de la bolsa italiana,
Consob, denunció este lunes el trabajo de PWC en la certificación
de las cuentas del Banco Popular de Novara y constató "graves irregularidades",
por lo que pidió su suspensión durante dos años.
En cuanto a Deloitte and Touche, la firma sufrió
una multa de las autoridades españolas de 540 mil euros (unos 485
mil dólares), por irregularidades en la auditoría de la compañía
financiera Gescartera, cuya quiebra provocó un escándalo
político el pasado verano. La caída en desgracia de Andersen,
arrastrada por el naufragio de Enron, ha hecho zozobrar a empresas de todos
los sectores.
"Es normal que actualmente asistamos a un pequeño
movimiento de pánico. Pero aunque el escándalo Enron ha sido
un choque para el mercado, tampoco es una sorpresa. Es un ejemplo dramático
de una deriva del sistema bursátil que todos conocíamos",
comenta René Ricol, vicepresidente de la Federación Internacional
de Expertos Contables.
A su juicio, el auditor es solamente uno de los elementos
de la cadena de control de cuentas, y su independencia respecto al cliente
es relativa.
"En el oficio de auditor hay un momento en el que hay
que firmar un informe, y el que signa sufre de hecho la presión
de varios actores cuyos intereses a menudo divergen. Se trata de la dirección,
de los asalariados, de los accionistas minoritarios, del Estado como agente
fiscal y del mundo judicial", explica.
Tras el escándalo Enron, los cinco grandes del
sector PWC, KPMG, Delitte and Touche, Ernst and Young y Andersen deberán
previsiblemente asumir las consecuencias.
Esas cinco empresas, en realidad, no son simplemente supercontables.
Al mismo tiempo venden sus consejos, a menudo en forma muy cara, tanto
en el campo fiscal como en lo que respecta a las fusiones y compras.
"Con Enron se cree que hemos abierto una caja de Pandora,
pero hace 15 a 20 años que sufrimos las consecuencias de la amalgama
de oficios (consultoría y auditoría), siempre con el mismo
tríptico: mala política, quiebra y malversación de
los dirigentes", confía el presidente del consejo de una de las
cinco grandes firmas.
Exigen devolver a California 9 mil millones de dólares
San Diego, 12 de febrero. Enron, el gigante de
la energía, hoy en quiebra, contribuyó al déficit
presupuestal de más de 12 mil 500 millones de dólares que
afronta California este año, aseguró la senadora demócrata
Barbara Boxer.
En una carta enviada a la Comisión Federal Reguladora
de Energía (FERC), Boxer informó que California afronta ese
déficit porque firmó contratos de suministro energético
en un periodo en el que Enron manipuló el mercado para establecer
precios sin precedentes.
"Dado que esos contratos se signaron cuando las tarifas
de electricidad eran artificialmente altas debido a la manipulación
del mercado, es obligación de la FERC examinar esos convenios y
fijar
tarifas justas", dijo Boxer en la carta a la que Notimex
tuvo acceso.
California firmó unos 40 contratos de abastecimiento
eléctrico por plazos de entre 10 y 20 años a principios de
2001, cuando agravó la crisis energética en este estado.
La electricidad en venta a California alcanzó precios
de entre 500 y 3 mil 900 dólares por megavatio, cuando en el resto
del país costaba 30 dólares en promedio la misma cantidad
de energía.
El gobierno autorizó 10 mil millones de dólares
en bonos para firmar los contratos y garantizar el suministro eléctrico,
pero unas semanas después de que se formalizaron esos convenios
las cotizaciones de la energía se normalizaron.
Sin saldar las cuentas de los contratos, los intereses
aumentaron otros 2 mil 500 millones de dólares en sólo un
año, y ahora el gobierno determina una serie de recortes presupuestales
para enfrentar la situación.
Dianne Feinstein, la otra senadora de California, demandó
hace una semana a la FERC que revise los contratos que el gobierno estatal
firmó cuando la principal corporación energética,
Pacific Gas and Electric (PGE), se declaró en quiebra y Edison declaró
insolvencia.
Boxer exigió que la FERC ordene que se devuelvan
a California unos nueve mil millones de dólares adicionales que
el gobierno pagó a la industria energética estadunidense
en "sobrecobros", antes de firmar los contratos, y por manipulación
del suministro.
NOTIMEX Y AFP