Incrementan vigilancia policiaca sobre simpatizantes
Por su "peligrosidad", remueven de cárcel al
dirigente de Paz y Justicia
ANGELES MARISCAL CORRESPONSAL
Tuxtla Gutierrez, Chis., 16 de febrero. Diego Vázquez
Pérez, líder de la organización paramilitar Paz y
Justicia, fue internado en el penal de Cerro Hueco, al tiempo que se implementó
un fuerte dispositivo de seguridad en poblados donde la agrupación
tiene presencia.
Policías sectoriales montaron un operativo
de "prevención" en la comunidad El Limar, municipio de Tila, ante
eventuales manifestaciones de inconformidad por parte de seguidores y simpatizantes
del indígena chol, quienes se reunieron para analizar las actitudes
que asumirán en respuesta a la detención de su dirigente.
Durante
las primeras horas de este sábado, Diego Vázquez, custodiado
por policías sectoriales y judiciales, fue trasladado de la cárcel
distrital de Salto de Agua, en la cual le tocaría ser procesado,
al penal de Cerro Hueco. La medida se tomó debido a la "peligrosidad"
del detenido, y ante posibles intentos de sus compañeros de organización
por liberarlo.
Comparecerá ante el juzgado primero del fuero común,
cuyas autoridades solicitaron al tribunal de Salto de Agua los expedientes
penales de Vázquez Pérez, que será juzgado, entre
otros delitos, por lesiones y privación ilegal de la libertad, actos
ilícitos que habría cometido desde 1997.
El viernes, horas antes de su detención, Vázquez
llamó a un medio de comunicación local para dar a conocer
que se refugiaba en su casa, custodiado por amigos y familiares, debido
a que hubo intentos por aprehenderlo.
En sus declaraciones a la prensa de Chiapas, acusó
al gobierno estatal de "provocar más enfrentamiento entre los indígenas
y caer en contradicciones".
Añadió que la mayoría de los casi
500 habitantes de El Limar se negó a firmar un acuerdo de paz promovido
por autoridades estatales.
El día de la firma del citado convenio, añadió,
"traté de entregar a Juan Esponda (comisionado estatal para la paz
y la reconciliación) un documento firmado por cientos de habitantes
de El Limar, en el cual se plantean varios puntos importantes para que
exista una real pacificación y convivencia social". Pero, aseguró,
Esponda se negó a recibirlo.
Inmediatamente después de la detención,
habitantes de diversos poblados donde tiene presencia Paz y Justicia convocaron
a una reunión en la comunidad Tzaquil, en donde hasta el cierre
de esta edición sesionaban para acordar las acciones que tomarán
en protesta por la aprehensión del dirigente.
Al respecto, el secretario de Gobierno, Emilio Zebadúa,
explicó que se buscará dialogar con la organización
"para explicarles que esta acción fue la aplicación de la
ley contra un individuo particular, y eso no significa que el gobierno
esté afectando los intereses o el bienestar de comunidades y organizaciones".
Sostuvo además: "Esperamos que los líderes
reunidos sopesen esto con toda responsabilidad, y reconozcan en esto la
aplicación del estado de derecho para que se continúe con
toda tranquilidad la vida cotidiana en la región".
Advirtió que el gobierno encabezado por Pablo Salazar
continuará transitando "por esas dos vías paralelas: la reconciliación
y el estado de derecho, actuando contra quienes son o han sido responsables
de la violencia en Chiapas". Con el despliegue policiaco, añadió,
se pretende resguardar "el orden y la tranquilidad"