Utilizaría el gobernador la fuerza pública en La Yerbabuena
Desde hace una semana el volcán de Colima registra 260 explosiones diarias
VERONICA GONZALEZ CARDENAS CORRESPONSAL
Colima, Col., 25 de febrero. Desde hace una semana el volcán de Colima cambió su comportamiento eruptivo, pues ha registrado un promedio de 260 explosiones diarias.
Además comenzó a derramar lava por los flancos suroeste, occidente y poniente del volcán, informó Carlos Navarro Ochoa, geólogo del Observatorio Vulcanológico de la Universidad de Colima.
De acuerdo con el especialista, a pesar de la actividad del coloso, las poblaciones de Colima y Jalisco asentadas en sus faldas no corren peligro, pues las rocas incandescentes que se desprenden del domo de lava apenas recorren dos kilómetros antes de detenerse. La población más cercana, La Yerbabuena, se ubica a 8.5 kilómetros del cráter.
El geólogo Navarro Ochoa señaló que el frente de lava principal se localiza en la parte suroeste del volcán y desde que se formó, el sábado antepasado, ha recorrido una distancia de 200 metros desde la cima.
Otros dos frentes de lava se localizan en el occidente y el poniente de la montaña, teniendo un recorrido de 20 metros diarios.
Indicó que el domo del volcán cubre totalmente el cráter y tiene acumulados 1.5 millones de metros cúbicos de lava solidificada, "pero como es muy poroso, permite la salida de vapor de agua y gases, que forman una fumarola de dos a tres kilómetros de altura".
El geólogo mencionó que desde el 5 hasta este domingo 24 se registraron al menos 2 mil derrumbes de rocas calientes, que se estacionan en las barrancas de El Cordobán, La Lumbre y San Antonio, por lo que el Sistema Estatal de Protección Civil recomendó a la Secretaría de Desarrollo Rural la remoción del material para prevenir accidentes por lahares, que son avalanchas de lodo formadas por lluvias mayores a 100 milímetros por hora.
Carlos Navarro apuntó que con base en las recomendaciones del Comité Científico Asesor del Volcán, se mantiene la zona de exclusión de actividades para Colima y Jalisco en 6.5 kilómetros y un radio de alertamiento preventivo de 11.5 kilómetros, áreas en las que se ubican dos poblaciones colimenses y diez de la vecina entidad.
Por su parte, el gobernador Fernando Moreno Peña advirtió que está dispuesto a utilizar la fuerza pública para reubicar a las 53 familias que habitan en el poblado La Yerbabuena si éstas deciden permanecer en en lugar, a pesar de que estén en peligro por su cercanía con el volcán.
La reubicación se pretende realizar en abril, en un predio de Cofradía de Suchitán, que urbaniza la administración estatal.