Les recomienda que asuman su responsabilidad como servicio
Critica el Arzobispado de Guadalajara los altos salarios de funcionarios; "es un acto inmoral"
Empezará a circular mañana en la entidad un semanario de la Iglesia católica, en el que les pide a los servidores públicos que sean solidarios con los ciudadanos
CAYETANO FRIAS FRIAS CORRESPONSAL
Guadalajara, 1Ɔ de marzo. El Semanario del Arzobispado de Guadalajara, que empezará a circular este domingo, publica en dos planas una severa crítica a los altos salarios que devengan los funcionarios. Precisa que "la cuestión de los elevados sueldos de los funcionarios públicos es un acto inmoral y de injusticia".
En un recuadro presenta los altos ingresos, libres de impuestos, que perciben el presidente Vicente Fox; el gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña; el presidente de municipal de Guadalajara, y los legisladores, que van de 232 mil pesos, el jefe del Ejecutivo, 152 mil el mandatario estatal y 110 mil el alcalde.
El texto precisa que "la cuestión de los elevados sueldos de los funcionarios públicos es un acto inmoral y de injusticia. Primero, porque no hay recursos suficientes para los servicios que demanda la sociedad, y, segundo, porque la sociedad se encuentra muy lejos del nivel de vida que ostenta un político (87 por ciento del erario público federal se emplea en salarios)".
El artículo presenta cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), las cuales "reportan que sólo 10 por ciento de la sociedad tendría salarios cercanos a los 15 mil pesos, y que este grupo estaría constituido principalmente por profesionales con posgrados y con cargos que demandan gran responsabilidad, de manera que el argumento de la responsabilidad y la preparación (sostenida por los funcionarios) se viene abajo".
El Semanario recomienda a los funcionarios que para evaluar los salarios de la alta burocracia, consideren el monto del sueldo mínimo y qué porcentaje de los gobernados lo gana. Que asuman su responsabilidad como servicio, no como si tuvieran una dirección gerencial. Que sean solidarios con los gobernados, para ganarse el respeto de éstos, y que publiquen los recibos de pago en Internet y en los diarios, así como que se precise cuánto se destina a salarios.